José Rangel sumó un nuevo episodio al cruce de palabras entre Lima y Caracas al reaccionar molesto a los dichos del presidente peruano, quien afirmó que Chávez quiere ser "presidente de América Latina".
El vicepresidente de Venezuela, José Vicente Rangel, calificó este viernes de "atorrante" y "fracasado" al presidente peruano, Alejandro Toledo, por sus críticas contra el presunto intervencionismo en la región de su par venezolano, Hugo Chávez.
Rangel reaccionó a las afirmaciones de Toledo quien dijo que Chávez supuestamente utiliza su "cartera de petrodólares" para tratar de posicionarse como "presidente de América Latina".
"Un atorrante, un gobernante fracasado como él (Toledo), no puede tener otro tipo de expresiones", afirmó Rangel en una reunión del partido oficialista Podemos.
El vicepresidente venezolano negó que su Gobierno intervenga en la región y agregó que "la política de integración" de Chávez "no está basada en dólares petroleros, sino es el mensaje bolivariano" de la unión entre los países latinoamericanos.
Venezuela y Perú viven una aguda crisis desde finales de abril pasado, que incluyó la retirada de los respectivos embajadores de cada país.
Tanto Rangel como el canciller venezolano, Alí Rodríguez, han dicho que la crisis bilateral se debe a la decisión inicial de Toledo de retirar a su embajador en Caracas y montar una acusación contra Venezuela en la Organización de Estados Americanos (OEA).
Perú acusó a Venezuela ante la OEA el pasado 3 de mayo por la "injerencia inaceptable" de Chávez en las elecciones peruanas, al expresar su apoyo al candidato nacionalista Ollanta Humala, pero el organismo panamericano no se pronunció al respecto por tratarse de "un tema bilateral".
La crisis comenzó cuando el candidato presidencial peruano, Alan García, calificó a Chávez de "sinvergüenza" en respuesta las críticas del gobernante venezolano contra Perú por la firma de un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
El jefe de Estado venezolano replicó y llamó a García "canalla, tahúr y ladrón", por lo que Toledo le reprochó su "intromisión" en la política peruana.
Chávez respondió que Toledo y García eran "caimanes del mismo pozo", lo que llevó a la retirada el pasado 30 de abril de su embajador en Venezuela, Carlos Urrutia, y Caracas hizo lo mismo cinco días después con su embajador en Lima, Cruz Martínez.
El presidente venezolano ha negado que se inmiscuya en asuntos peruanos por manifestar pública y reiteradamente su abierto respaldo a Humala, que disputará la presidencia con García en una segunda vuelta el 4 de junio. (Agencias)
