Esto por las agresiones que sufrieron varios presos de la cárcel de Rancagua en agosto del 2013.
Ministerio Público desistió de acusar a otros seis funcionarios por falta de pruebas.
Los maltratos fueron registrados por las cámaras del penal.
La Fiscalía de Rancagua presentó una acusación por tormentos y apremios ilegítimos contra 19 gendarmes, entre ellos dos oficiales, que agredieron a cerca de 55 reos del penal en agosto del 2013, luego de un intento de fuga.
"Los llevan hasta un patio central, los hacen arrodillarse y ahí comienzan a golpearlos, golpiza que dura aproximadamente una hora, una hora y media. Palos, patadas, golpes de mano, de todo", explicó el fiscal Carlos Fuentes.
La "acusación se presentó contra 19 gendarmes, entre ellos hay dos oficiales, por el delito de tormentos y apremios, que es comúnmente conocido como el delito de tortura", agregó el persecutor.
Faltas de pruebas
El Ministerio Público decidió no acusar a otros seis funcionarios penitenciarios por falta de pruebas.
Una acción que fue valorada por el jefe de la Unidad de Estudios de la Defensoría Penal Pública de O'Higgins, Victor Providel, quien destacó que esto "es una consecuencia de lo que habíamos señalado desde el inicio de la investigación".
"A los oficiales se les formalizó por haber omitido su rol de autoridad en los hechos que estaban siendo investigados, que ellos no habían dejado de cumplir sus deberes, más cuando ellos llegan al lugar de los hechos (y) empiezan a disminuir la intensidad de los golpes y, en definitiva, cesan lo que estaba ocurriendo en ese momento", detalló Providel.
Las partes involucradas en el proceso judicial deberán esperar ahora que el tribunal fije una fecha para iniciar la audiencia de preparación del juicio oral.
