Luego que el ex conscripto Fernando Guzmán rompiera el pacto de silencio en torno al caso quemados, que permitió al juez Mario Carroza reactivar la causa con la detención de siete ex militares, también se conoció su acusación de las órdenes institucionales del Ejército de guardar silencio en torno a los casos de violaciones de derechos humanos durante la dictadura.
En ese sentido, el ex conscripto manifestó que recibió órdenes directas para mentir en su declaración ante la Justicia Militar y, más aún, que hubo reuniones para coordinar los testimonios. Una de ellas, en el Regimiento Los Libertadores, fue liderada por el entonces segundo comandante en jefe del Ejército, general Santiago Sinclair.
Ante esto, uno de los hombres de confianza de Pinochet, el ex vicecomandante en jefe del Ejército, Guillermo Garín, desmintió que hayan existido órdenes de ocultar información.
"Eso es una gran mentira. Por lo menos en el tiempo en que yo existí como tal, como oficial en servicio activo, jamás existió ningún acuerdo que fuera institucional", dijo Garín.
"Eso no existió, por lo menos a mí, incluso anteriormente a mi designación como vicecomandante en jefe del Ejército y en todos los puestos que tuve, jamás se dio una instrucción en ese sentido", afirmó Garín.
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Gobierno: "Existen los pactos"
No obstante, el director ejecutivo del Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, Francisco Ugás, se explayó en torno a los pactos de silencio en el organismo castrense que han evitado conocer mayor información sobre los atropellos a los derechos humanos.
"El caso de Víctor Jara, el de Littré Quiroga Carvajal, por ejemplo en el caso Conferencia también se ha podido llegar a la información relativa a que existía un cuartel de exterminio, que era Simón Bolívar, a propósito de la declaración de uno de los ex agentes de la Dina, pero nadie previamente había mencionado la existencia de dicho cuartel", indicó.
"Existen estos pactos y nosotros llamamos también a todos quienes en alguna oportunidad suscribieron estos pactos de silencio a que entreguen la información relativa a los hechos criminales verificados", complementó Ugás.
Las FF.AA. de ayer y hoy
En tanto, el ministro de Defensa, José Antonio Gómez, pidió no confundir las responsabilidades del ayer con las instituciones de hoy.
"Cuando hablamos de gente que ha cometido crímenes estamos hablando de gente que está fuera del Ejército", subrayó.
"No podemos confundir los pactos de silencio con las instituciones. Aquí hay personas que cometieron delitos graves que probablemente han mantenido silencio, pero no confundamos a las Fuerzas Armadas en esta materia, ese es un gravísimo error", recalcó.
