La clave es "hacer las cosas distinto y romper los esquemas", dijo a Cooperativa Eligio Salamanca, ganador del "Global Teacher Prize Chile 2016".
La innovación, la motivación de los alumnos, tomar dificultades como oportunidades e integrar a la cultura mapuche son parte de su método.
Salamanca trabaja desde 1988 en la escuela de la localidad rural de Quelhue, Región de la Araucanía
Eligio Salamanca, profesor de la Escuela de Quelhue y ganador del "Global Teacher Prize Chile 2016", entregó este domingo en Cooperativa parte de los secretos de su método educativo, que lo llevaron a ser reconocido como el mejor docente del país.
La innovación, la motivación diaria de los alumnos, recordar que todo se puede mejorar y tomar las dificultades como oportunidades, junto con la integración de la cultura mapuche, son parte de las claves que entregó Salamanca en conversación con el programa Cooperativa Elige Educar.
"Hacer las cosas distinto y romper los esquemas, no hacer lo que todos hacen y hacer lo que no está; eso es cumplir los ideales, que no son inalcanzables. Los niños pueden ir cumpliendo sus ideales -que, a veces, puede ser aprender a leer, y cuando lo cumplen, este ideal se extiende más allá", explicó el maestro.
Salamanca, quien trabaja desde 1988 en la escuela de la localidad rural de Quelhue, a 10 kilómetros de Pucón, en Región de La Araucanía, subrayó que "siempre hay algo por hacer mejor, y eso es algo que el profesor no tiene que olvidar nunca".
"Es algo relevante ser capaz de motivar a los profesores de que no importa el lugar ni las dificultades: sí es posible cumplir nuestros sueños y los de nuestros niños. Las dificultades son oportunidades, cuando todo el entorno parece ser complejo", reflexionó.
El profesor también puso importancia en involucrar al pueblo mapuche en el proceso educativo. "Encuentro ajena cualquier predisposición por lograr metas importantes si no se les involucra a ellos en su esencia, como gente de la tierra", contó.
Para implementar su innovador método educativo, Eligio Salamanca construyó un invernadero donde enseña matemáticas -midiendo áreas y perímetros-, lenguaje y ciencias, invitando a sus alumnos a investigar y elaborar descripciones e informes.
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