En El Diario de Cooperativa, el presidente de los obispos chilenos enfatizó que la búsqueda de soluciones consensuadas permitirá superar problemas sociales, como el Transantiago.
El presidente de la Conferencia Episcopal, Alejandro Goic, destacó como necesario que los actores sociales dejen de lado intereses ideológicos y partidarios particulares a la hora de discutir problemas que cruzan al país, como la mala distribución de la riqueza o el plan Transantiago.
"Es respetable la opinión de cada grupo y es bueno que en una democracia coexistan visiones diferentes, eso enriquece la vida de un país, pero ante los grandes temas, como es la violencia, la delincuencia, la necesidad de un transporte público digno para la gente, especialmente en la capital, (que) son temas que cruzan las posiciones ideológicas, (y) por lo tanto debería haber una esfuerzo, como gracias a Dios se hizo en educación", enfatizó.
En conversación con El Diario de Cooperativa, el obispo de Rancagua subrayó que "el diálogo es el principal camino para la solución de conflictos".
"Lo que vimos en educación quisiéramos verlo en los grandes temas, porque lo que importa es el bien de todos los chilenos, y no sólo defender posturas personales, ideológicas", recordó.
Respecto al caso del plan Transantiago, Goic estimó que "las soluciones tienen que pasar por ponerse en el lugar de los más humildes y ver si yo estaría dispuesto a vivir como está viviendo diariamente la inmensa mayoría de los santiaguinos".
Sin embargo, el sacerdote tuvo palabras para los mil pesos que aprobó el Congreso como presupuesto para el sistema de transporte: "Esa cifra simbólica resulta un poco risible frente a un tema tan delicado y que está haciendo sufrir a mucha gente".
Consultado por la discusión de un salario ético, concepto que él mismo acuñó, Goic valoró que la "sociedad chilena ha estado entendiendo" el problema social que planteó.
"Si no somos inteligentes, el conflicto social vendrá. En un país que ha recuperado su democracia, realmente de una manera ejemplar, que ha estado creciendo paulatinamente, evidentemente que este tercer paso es absolutamente necesario, la gente así lo ha percibido", resumió.
Por ello, "el eco que encontró el llamado de la iglesia en todo el país significa que hemos respondido a una necesidad muy sentida por la población".
No obstante, monseñor Goic reiteró que para la Iglesia Católica este espíritu de diálogo también debe abarcar temas como el uso de la llamada "píldora del día después", cuya distribución fue decidida por "normas inconsultas, hechas por gente con una visión ideológica determinada".
Para los obispos, concluyó, se trata de "un tema intransable", porque se refiere al origen de la vida. (Cooperativa.cl)
