El máximo tribunal ratificó las penas de tres años para Ignacio Wulf, Enzo Bertinelli y Francisco Edwards Braun.
El caso Inverlink se remonta a febrero de 2003.
La Corte Suprema confirmó en un fallo unánime una resolución dictada por el ministro en visita Carlos Gajardo Galdames para la arista "remesas" del denominado caso Inverlink.
La Segunda Sala del máximo tribunal –integrada por los ministros Hugo Dolmtesch, Carlos Künsemüller, Haroldo Brito y los abogados integrantes Jean Pierre Matus y Jorge Lagos– ratificó la sentencia que condenó a penas de tres años de presidio menor en su grado medio a Ignacio Wulf Hitschfeld, Enzo Bertinelli Villagra y Francisco Edwards Braun.
La Suprema también confirmó las absoluciones de Orlando Collarte López y Marcelo Díaz Prieto, imputados por infringir el artículo 59 de la Ley Orgánica del Banco Central.
En su fallo (ver archivo adjunto) el máximo tribunal descartó que la sentencia impugnada se hubiera adoptado con infracción de la ley.
El caso se remonta a febrero de 2003, cuando el entonces presidente del Banco Central Carlos Massad descubrió por un mail rebotado que su secretaria Pamela Andrada había estado filtrando información privilegiada a la corredora de bolsa Inverlink. Los inversionistas del grupo retiraron en forma masiva sus dineros, por lo cual el holding -coludido con el ex jefe de Tesorería de Corfo Javier Moya- sustrajo 85 mil millones para hacer frente a la corrida.
Este episodio implicó la salida de su cargo del vicepresidente ejecutivo de Corfo, Gonzalo Rivas, yerno del ex Presidente Ricardo Lagos, quien acuñó a propósito de este caso su recordada metáfora del "jarrón pérdido" para asegurar que el dinero defraudado sería recuperado.
En febrero de 2015 murió Eduardo Monasterio Lara, ex presidente de Inverlink y uno de los principales involucrados en el caso, quien poco antes había sido condenado a 541 días de cárcel por los delitos de malversación de caudales públicos, estafas y soborno.
