Senador y vicepresidente del PPD aseguró que la renuncia de Sebastián Dávalos era inevitable.
Afirmó que la revelación dejó a "contrapelo, outside, sin tener bien claro cómo reaccionar" al conglomerado.
"El caso Dávalos y el caso Penta termina irradiando más carga negativa a la ya alicaída imagen de la política en Chile", afirmó.
El vicepresidente del PPD, senador Ricardo Lagos Weber, aseguró que la renuncia de Sebastián Dávalos se debió a que "entendió que acá lo que se estaba generando era un daño a un colectivo, a un bien común que había que cautelar, que es el Gobierno".
En conversación con El Diario de Cooperativa, el parlamentario se refirió a los cuestionamientos que recibió el hijo de la Presidenta Michelle Bachelet tras aprobarse un crédito de 6.500 millones pesos para la sociedad que tiene su esposa.
A juicio del parlamentario, Dávalos "entendió que acá lo que se estaba generando era un daño a un colectivo, a un bien común que había que cautelar, que es el Gobierno, que es el Gobierno de su Presidenta, de su madre y de la Nueva Mayoría".
La renuncia "era inevitable dado el revuelo que generó, las complicaciones que generaba al Gobierno y a la Nueva Mayoría y desde ese punto de vista se valora. Algunos dirán que podría haber sido un poco antes, (pero) la explosión hacía muy difícil que él siguiera cumpliendo las responsabilidades que había asumido por encargo de la Presidenta", añadió.
En ese sentido, explicó que el conflicto "para nosotros, la Nueva Mayoría, era que tenemos un sello en este Gobierno que es el combate a la desigualdad, a la arbitrariedad, a los privilegios y pareciera de la forma en que se expresó este caso ante la opinión pública, que eso estaba a contrapelo con lo que era el sello del Gobierno y de la misma Presidenta".
"Eso explicó además el silencio de nosotros durante seis días, porque quedábamos un poco a contrapelo, outside, sin tener bien claro cómo reaccionar ante una materia de esta naturaleza", explicó.
"Mínimo de criterio"
El senador Lagos Weber sostuvo que "comprar a un precio, vender a otro precio mayor y quedarse con la diferencia eso ocurre todos los días y eso no es un pecado, el tema es que para hacer eso tuvo que ser recibido por una persona que le permitió un crédito, le permitió hacer una diferencia".
En ese contexto, aseguró que "si uno está en situación de relación con el poder, con el Gobierno, en situaciones de influencia tienen que tener un mínimo de criterio para abstenerse a hacer ciertos actos", declaró afirmando que su opinión la realiza dada su experiencia como hijo de un ex Presidente de la República.
Al mismo tiempo, declaró que "una vez que él deja su responsabilidad en el Gobierno, él tendrá que explicar como persona aquellos temas que a algunos les merezcan dudas".
Comparación con caso Penta
Si bien para el senador "acá no hubo nunca un ilícito, al parecer, ni hay delitos funcionarios", aseguró que "lo que ha ocurrido en el caso Dávalos y en el caso Penta termina irradiando más carga negativa a la ya alicaída imagen de la política en Chile".
Pero enfatizó en que el caso Penta "es gravísimo" pero por otras connotaciones, puesto que "es un delito, hay gente que va a ser procesada".
En ese sentido, destacó la renuncia de Dávalos y señaló que si bien los parlamentarios no pueden renunciar, los involucrados en el caso Penta confesos al menos podrían abstenerse de votar mientras dure la investigación.
