Tras su formalización, Francisco Cartes quedó con medidas cautelares.
El Vaticano indaga al religioso quien está suspendido de sus funciones eclesiásticas.
El sacerdote Francisco Cartes, de 50 años, quedó en libertad luego que el Ministerio Público lo formalizara por el delito de abuso sexual reiterado contra un menor de edad en el Santuario El Carmen de Curicó.
El tribunal determinó medidas cautelares al religioso quien no podrá acercarse a la víctima y su familia, además deberá firmar semanalmente en el juzgado y quedó con arraigo nacional.
El abogado querellante, Jorge Reyes, explicó "son cuatro hechos que el fiscal precisó en su formalización, por lo tanto, no estamos hablando de un solo hecho".
Reyes detalló que entre ellas están incluidas las "tocaciones de carácter sexuales en sus genitales y besos; y hay un caso de exposición actos de significación sexual procurando su propia excitación, estando el sacerdote desnudo realizó actos de masturbación en presencia del menor".
La defensa del sacerdote encabezada por Cristián Rillón, manifestó su cuestionamiento a los informes sicológicos realizados a la víctima.
"El hecho de que haya un informe de una sicóloga que diga que lo que dice el menor resulta creíble no constituye el apoyo al fundamento de su declaración", enfatizó.
El sacerdote, quien dijo estar "muy bien y muy tranquilo" tras la formalización, está siendo investigado por el Vaticano periodo en el cual se encuentra suspendido de sus funciones eclesiásticas.
