Hugo Bravo pidió indemnización de 2.300 millones de pesos tras ser despedido.
Los controladores de Penta enviaron un representante para declarar, siendo rechazado por el juez.
Délano y Lavín no se encontraban en Santiago este martes.
Este martes se dio inicio en el Segundo Juzgado del Trabajo de Santiago el juicio laboral frente a la demanda por 2.300 millones de pesos que presentó el ex gerente general del Grupo Penta, Hugo Bravo, contra sus ex empleadores Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín tras ser despedido.
Los controladores no llegaron hasta la audiencia y enviaron un representante legal que fue rechazado por el juez David Muñoz para declarar por Délano y Lavín. El abogado de ambos, Alvaro Pizarro, aseguró que ya se comunicó con ellos, que estaban fuera de Santiago y que están dispuestos a declarar durante la jornada de este miércoles.
Pizarro manifestó que "me acabo de comunicar con Carlos Eugenio Lavín y está absolutamente dispuesto a concurrir al tribunal mañana (miércoles). Viene viajando hacia Santiago para ese efecto. Si el juez así lo permite, va a declarar. Si el juez no lo permite, no va a declarar".
Explicó que no acudieron a declarar durante esta jornada porque "el Código del Trabajo da la oportunidad y uno tiene el derecho a designar un apoderado para estos efectos, cosa que se hizo por escritura pública. El juez estimó que la persona a la que se le dio el poder tenía que tener habitualidad en la representación de la empresa y cómo esto ocurrió hace poco, el despido de Bravo, y esta designación fue el 8, es difícil tener habitualidad en dos días".
Si bien se ha mostrado la disposición de ambos para declarar para las pruebas confesionales, será el juez el que decida aceptar que se presenten este miércoles o que se continúe este juicio sin estas pruebas.
Alrededor de las 16:30 horas se retomó la audiencia, donde el ex gerente declaró ante el juez que se le despidió por "incumplimiento grave del contrato del trabajo por haber mantenido contratado a personas de dudosa reputación".
Mientras que defensa de los controladores del holding afirmó que tiene una prueba irrefutable para tener la razón en este juicio, que es el finiquito firmado por Bravo.
