El movimiento social se mantiene escéptico ante el anuncio de cierre de la planta de Agrosuper.
"Ya nos mintieron una vez", explicaron a Cooperativa.
Los accesos a la comuna de Freirina, en la Región de Atacama, se mantienen bloqueados a esta hora de la noche, pese al anuncio de Agrosuper de su decisión de cerrar "indefinidamente" la planta procesadora de cerdos que desató las protestas de los vecinos.
Dirigentes del Movimiento Freirina Consciente y de SOS Huasco explicaron a Cooperativa que esta actitud responde a su desconfianza hacia la empresa y también a las autoridades de Gobierno, que aceptaron la reapertura de la planta que habían ordenado cerrar hace pocos meses por la emanación de malos olores y el riesgo sanitario para la población.
"Nosotros no vamos a levantar las tomas hasta que nos den una solución definitiva, que sea real, no engaño, porque si nos engañaron una vez, la segunda ya no" va a resultar, dijo una manifestante.
"Ya nos mintieron una vez. Estamos frente a los empresarios más mafiosos de nuestro país, que se la saben por libro y han ido a estudiar al extranjero, y así joden a nuestra gente", señaló otro dirigente.
"La primera vez pecamos de inocentes, lloramos mucho de emoción y hoy no creemos nada", sentenció una mujer.
Mientras éste es el escenario que se vive en los accesos y alrededores de Freirina, en el pueblo mismo hay tranquilidad, aunque, tal como la primera vez, algunos vecinos muestran preocupación por la pérdida de empleos que implicará la decisión de Agrosuper.
