Patrullero nacional se dirige a rescatar a ocupantes de nave encallada en la Antártica

Un crucero con 122 personas a bordo -33 tripulantes y 89 pasajeros- quedó varado este jueves en la Antártida y patrullas de rescate de Argentina y Chile se dirigen a la zona para auxiliar a la embarcación e inspeccionar las maniobras de evacuación, informaron fuentes oficiales argentinas.

Mariano Mémoli, titular de la Dirección Nacional del Antártico de Argentina, aseguró que el crucero "Ciudad de Ushuaia" quedó encallado "sobre piedra" en la Bahía Guillermina, entre las bases argentinas de apertura temporal Brown y Primavera, al noroeste de la península antártica.

"No hay heridos ni peligro de hundimiento. La gente está bien y todavía no hay derrame de combustible, pero puede haberlo", precisó Mémoli en declaraciones al canal de televisión Todo Noticias.

El funcionario comentó que el buque, de bandera panameña, pero propiedad de una empresa argentina, transporta 89 pasajeros y 33 tripulantes.

"En esa zona hay una patrulla combinada de Argentina y Chile. El buque chileno está más cerca que el argentino, que tardará unas siete horas en llegar", apuntó.

Dijo que los pasajeros del "Ciudad de Ushuaia" serán evacuados en otros dos cruceros turísticos que también navegan por la región, a unos 1.300 kilómetros al sur de Ushuaia y cuya situación climática es "benigna, aunque se registran temperaturas bajo cero".

"También está en camino un avión de la Armada argentina, pero como no puede aterrizar en la zona se dirige hacia allí sólo para reconocimiento", añadió.

El capitán del buque, el contraalmirante Daniel Alberto Martín, en comunicación con el Centro Coordinador de Búsqueda y Rescate Marítimo de la base naval Ushuaia, informó que el buque se encuentra varado con entradas de agua y pérdidas de combustible y que la totalidad de la dotación de a bordo se encuentra en buen estado de salud.

En noviembre de 2007, el Explorer, un crucero internacional, encalló en el territorio antártico chileno y se hundió en las congeladas aguas por lo que naves nacionales debieron acudir en su rescate.