Osvaldo Rosales hizo una positiva evaluación de las conversaciones tendientes a desarrollar acuerdos económicos durante la cumbre APEC, especialmente las sostenidas con los países asiáticos.
El jefe de la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales del Ministerio de Relaciones Exteriores (Direcon), Osvaldo Rosales, hizo un positivo balance de la cumbre APEC en términos de relaciones comerciales, sobre todo por el inicio de las conversaciones con China para avanzar hacia un Tratado de Libre Comercio (TLC).
En entrevista con El Diario de Cooperativa, Rosales mencionó que Chile, además, concordó con Nueva Zelanda y Singapur comenzar negociaciones durante el primer trimestre de 2005, con Perú acordar en diciembre las fechas de las rondas de negociaciones, y con Japón, empezar a evaluar un TLC.
"Creo que el balance es bastante notable y confirma que Chile ya ha puesto la prueba en dirección del Asia Pacífico, para aprender de esa experiencia y para sustentar una capacidad de crecimiento elevado, estable y ojalá con un mayor énfasis en innovación tecnológica", expresó Rosales.
En este cuadro, China aparece como el logro más significativo, porque "en los últimos cinco años, juega un rol gravitante en la economía mundial, tanto a nivel de comercio como en finanzas internacionales". A su juicio, todo indica que en 2010 China podría superar a Alemania en materia producto interno, el 2020 a Japón y como indican "los analistas, en 2040 podría ser la economía más grande del mundo".
Para el jefe de Direcon, el hecho de que Asia comience a acercarse a América Latina constituye una serie de oportunidades comerciales de inversión, de negocios tecnológicos, de intercambio cultural, de manera que es preciso aprovechar las tremendas expectativas de crecimiento que han generado en los últimos 20 años.
La aproximación del gigante asiático a América del Sur plantea un desafío crucial, añadió. En este sentido, es necesario un mejoramiento de la infraestructura "porque si China tiene que sacar soya, distintos tipos de energía, minerales por el Pacífico, eso significa tener una infraestructura adecuada para poder aprovechar ese vertiginoso ritmo de crecimiento de la economía china para nuestro propio beneficio".
Según Rosales, esta aproximación estratégica hacia nuestra region genera condiciones inéditas para que avancemos rápido en la propia integracion regional.
En ese contexto, los tratados que podamos tener con Perú, Ecuador, o Bolivia, "nos permitirán generar una zona de integración económica para que quienes vivan en ella, tengan mejores oportunidades de empleo y de incremento en su bienestar".
