La ministra de Defensa indicó que los soldados chilenos en Puerto Príncipe tienen cascos y chalecos antibalas de última generación, que garantizan su seguridad.
Tras dar una clase magistral en la Universidad de Concepción, la titular de Defensa, Michelle Bachelet, salió al paso de las preocupaciones que provocaron las palabras del general Juan Emilio Cheyre, sobre los ataques con armas de fuego que han sufrido los miembros del contingente militar chileno en Haití.
Bachelet destacó que antes de embarcar a las tropas, el Ejército minimizó los riesgos al entregar a sus oficiales y suboficiales cascos y chalecos antibalas de estándares internacionales, que han sido aprobados por Naciones Unidas (ONU) e iguales a los que utilizan las tropas de otros países que participan en la misión de paz.
Aunque reconoció que existe un riesgo para los soldados en Puerto Príncipe, la ministra explicó que se han evitado situaciones peligrosas gracias al protocolo de acción que se implementó para todos los efectivos en Haití, y que busca evitar los enfrentamientos armados con posibles focos de resistencia local.
En Haití están desplegados 333 efectivos de Fuerzas Especiales del Ejército, quienes llegaron a la isla el pasado 3 de marzo, como parte de la misión de paz solicitada por el secretario general de ONU, Kofi Annan.
