En el cuartel de las fuerzas multinacionales, el subsecretario agradeció a los militares por sus funciones y les recalcó su gran labor en el país antillano.
El subsecretario de Relaciones Exteriores, Cristián Barros, asistió a una emotiva ceremonia en el cuartel de las fuerzas multinacionales junto a los 333 soldados chilenos que se encuentran en Haití, a los que les entregó el saludo cordial del Presidente Lagos y de la población de Chile, como lo informó el enviado especial de Radio Cooperativa, Miguel Acuña.
"Les traigo el saludo personal del Presidente de la República, pero también les traigo el saludo de tantos chilenos que los siguen a través de los medios de comunicación viendo lo que están haciendo, y fundamentalmente sintiendo que con ustedes ellos también están haciendo paz acá", afirmó.
El vicecanciller agregó que "es una de las misiones más difíciles que hemos tenido que enfrentar. Ustedes, probablemente, lo han podido constatar en estos días y probablemente en las soluciones que se vayan alcanzando en las semanas que vienen. Ustedes también tendrán la satisfacción de que cada paso que se dé a favor de la paz en el restablecimiento de la institucionalidad democrática, va a ser obra también de ustedes".
Uno de los jefes policiales haitianos, se refirió a las labores de las tropas chilenas y afirmó que es "muy valioso el hecho que las fuerzas armadas de chilenos viene aquí para estar al lado de la policía y para cumplir un deber de la humanidad y por eso me siento muy feliz. (...) En este punto, Chile va a ser siempre un país grande".
Además, el subsecretario visitó al embajador chileno en Haití, Marcel Young y se reunió con representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Barros también se reunió con el primer ministro de Haití Gérard Latortue, con quien conversó y debatió sobre el problema que envuelve al país caribeño, en donde el jueves se llevó a cabo una manifestación de partidarios del ex mandatario Jean Bertrand Aristide, la que terminó con una persona muerta, la que fue decapitada por un desconocido con un machete en las cercanías del Palacio Nacional.
