La subsecretaria de Relaciones Exteriores, Gloria de la Fuente, citó al embajador de Perú en Chile, Jaime Pomareda, al Ministerio de Relaciones Exteriores, para expresar formalmente la molestia y preocupación del Gobierno por el emplazamiento que realizó el alcalde de Tacna, Pascual Güisa.
La autoridad peruana fustigó en CNN Chile que "no debemos permitir que un innombrable -y discúlpeme pueblo chileno- un irresponsable como su Presidente esté trasladando los problemas a la frontera. Esto no lo debemos permitir".
Debido a estos dichos, el embajador peruano fue citado en horas de esta tarde a Teatinos 180 para recibir una nota de protesta, y se retiró sin emitir declaraciones.
A través de una declaración pública, la Cancillería señaló que en la cita se "resaltó la disposición permanente del Gobierno de Chile por trabajar mancomunadamente en aras de buscar una solución a la crisis migratoria que actualmente afecta, principalmente, a las ciudades de Arica y Tacna, reiterando la voluntad de seguir trabajando, en un marco de respeto, por el fortalecimiento de vínculos permanentes de amistad y cooperación entre ambos pueblos hermanos".
Más temprano, la ministra del Interior, Carolina Tohá, expresó que "palabras como esa no contribuyen en lo más mínimo a hacerse cargo del tipo de fenómeno que tenemos al frente y al rol que nos corresponde", quien remarcó que la Cancillería "ha estado en contacto con Perú desde el primer momento en que esto se empezó a producir y, además, las autoridades y funcionarios responsables de la frontera han estado atentos también".
La situación se ha tensionado en la frontera norte en las últimas semanas debido a la presencia de miles de extranjeros -en su mayoría venezolanos- que intentan salir de Chile, pero que no son autorizados para entrar a Perú. En este escenario se dio la denuncia de la televisión peruana respecto a militares chilenos que estaban "facilitando" el ingreso de indocumentados a su país.
Un grupo de decenas de migrantes esquivó este jueves el despliegue policial en la frontera y trató de cruzar por el desierto la denominada Línea de la Concordia, que divide ambos países. Estos incidentes ocurrieron en el primer día del estado de emergencia decretado por el Gobierno peruano en Tacna.
