Plazo para cumplir las exigencias vence en 2014.
"Esto no es un derecho adquirido, no basta con presentar la solicitud", aseveró la superintendenta (s)
Desde junio de 2014, todos los hospitales, centros de salud y clínicas deberán tener su certificación al día para poder entregar prestaciones para enfermedades de alta complejidad que están cubiertas por el Plan AUGE.
Actualmente, un 21 por ciento de estos centros no han sido acreditados, esto en el marco de las garantías de calidad que establece el nuevo decreto para las enfermedades contemplados por el Estado.
La superintendenta (s) de Salud, Liliana Escobar, indicó que "hubo 11 instituciones que se presentaron y no acreditaron. Esto no es un derecho adquirido, no basta con presentar la solicitud y estamos ciertos de que van acreditar".
"Un 21 por ciento no ha cumplido todas las exigencias que este sistema les impone, por lo tanto es muy importante que las instituciones se preparen bien para este fin para que puedan cumplir el próximo año con esta exigencia de acreditación".
Para 2014 los recintos de alta complejidad, que otorguen tratamiento para algún trastorno que pueda llevar alguna complicación, deben tener su certificación y estar inscritos en Registro de Prestadores Acreditados de la superintendencia.
Motivos de rechazo
Agregó que respecto a los motivos para rechazar una acreditación "son distintos si se trata de un centro de atención ambulatorio a una clínica que entrega hospitalización, o a un laboratorio, son variadas las causas de las fallas. Lo más recurrente es que no tenga una ficha única, que no hay la opción de trazabilidad de las biopsias para que no haya cruces de muestras".
La acreditación es voluntaria, pero quienes no tengan este requisito no podrán entregar ninguna prestación contemplada en el AUGE. La idea es que para julio de 2014, todos los centros de atención que brinden hospitalización deberán estar acreditados y registrados para este servicio.
Además, para julio de este año solo podrán entregar prestaciones los profesionales inscritos en el Registro Nacional de Prestadores Individuales, administrado por la superintendencia de Salud.
