El servicio básico se encuentra interrumpido luego del terremoto de 7,9 grados en la escala de Richter ocurrido el lunes a las 18:44 horas en la Primera Región.
El ministro de Obras Públicas, Jaime Estévez, destacó que la "primera preocupación" de su cartera es reponer el abastecimiento de agua potable en Iquique, que se encuentra fuera de servicio desde la tarde del lunes, debido al fuerte movimiento telúrico que afectó a la zona, dejando al menos 11 muertos.
"La primera preocupación es el agua en la ciudad de Iquique, que está con dificultades de abastecimiento producto de una falla eléctrica", señaló y explicó que la falla se originó en Pozo Almonte.
En tanto, el gerente regional de la empresa sanitaria Aguas del Altiplano, Carlos Barbosa, salió al paso de afirmaciones que circulaban entre la población, indicando que "no se han mezclado potable con aguas servidas".
Además, destacó que se trabaja en coordinación con las autoridades para reestablecer el servicio, que no opera en el sector centro y norte de Iquique, donde distribuyen agua camiones aljibes.
Barbosa llamó a la población de la Región de Tarapacá a hacer un uso racional del agua, destinándola sólo para alimentación e higiene.
Vialidad y vivienda
El ministro Estévez también hizo referencia a los problemas de vialidad en la zona del terremoto. "En la conectividad tenemos muchas dificultades, hay mucho derrumbe y en la Ruta 5 tenemos un tema de socavamiento", reconoció, añadiendo que están inquietos por la situación de los puentes en la región afectada.
Por su parte, la ministra de Vivienda, Sonia Tschorne, reconoció que algunas viviendas del Serviu presentan problemas en Iquique.
"Hay un conjunto que presentaría problemas, pero no son las viviendas en sí, si no aquellas ampliaciones que se hicieron, que -al ser de materiales distintos, al no contar con la asistencia técnica adecuada- han presentado fracturas", explicó.
