Más de 500 expertos participan del Congreso Iberoamericano de prevención de riesgos.
"La prevención de riesgos laborales ya es parte de las políticas de Gobierno", añadieron sus autoridades.
Expertos de Iberoamérica en prevención de riesgos laborales descartaron este miércoles en Santiago un aumento de accidentes de trabajo debido a las restricciones que puedan haber tomado algunas empresas para reducir costes a causa de la crisis económica mundial.
"No debiera ocurrir porque las empresas estarían perdiendo productividad y credibilidad", señaló el secretario General de la Organización Iberoamericana de la Seguridad Social (OISS), el español Adolfo Jiménez Fernández.
Jiménez Fernández participa en Santiago junto a unos 150 delegados de doce países, entre ellos España y Portugal, y más de 400 representantes chilenos en la III Edición del Congreso Iberoamericano de prevención de riesgos labores organizado por la OISS, el Gobierno chileno y la Asociación de Mutuales de Chile.
El encuentro, cuyo tema central es la "Estrategia Iberoamericana de Salud 2010-2013", tiene por objetivo propiciar el intercambio de conocimientos y experiencias de las personas comprometidas en la reducción de la siniestralidad laboral y el desarrollo de la seguridad y salud de los trabajadores de la región.
Jiménez Fernández desdramatizó la crisis frente a la prevención de riesgos laborales, ya que en su opinión éstas se rigen en prácticamente todo el mundo por códigos universales.
"Es cierto que aún hay países muy atrasados, donde las cifras se nos arrancan, pero en Europa y en muchos países de Iberoamérica la prevención de riesgos laborales ya es parte de las políticas de Gobierno", añadió.
Según la OISS, el coste social, humano y económico de la siniestralidad del continente es inaceptable, pues cada año pierden la vida 39 mil personas en los más de 30 millones de accidentes de trabajo que ocurren en la región.
Para el delegado es inaceptable que de 17,5 millones de niños latinoamericanos comprendidos entre cinco y catorce años que se ven obligados a trabajar, 22.000 mueran cada año a consecuencia de accidentes y enfermedades profesionales sin contraprestación alguna.
En tanto, Andrés Concha, secretario general de la Confederación de la Producción y el Comercio chilena (CPC), señaló en su intervención que la tarea preventiva ha sido un tema fundamental para intentar disminuir en Chile los accidentes y riesgos laborales.
El subsecretario chileno de Prevención Social, Mario Ossandón Cañas, fue categórico al indicar que "lamentablemente aún en Chile muere un trabajador por día".
"Como Gobierno estamos trabajando para crear las condiciones dignas para el trabajador, pero también las condiciones estables en seguridad", añadió Ossandón, quien agregó que "hay en Chile 1,5 millones de trabajadores fuera de la protección social".
