Pablo Ramírez fue atacado por delincuentes el pasado 29 de julio en Hualpén.
Aseguró que continuará con su "lucha antidelincuencia".
"Vamos a seguir con la lucha antidelincuencia", apuntó Ramírez al salir de la Mutual de Seguridad.
La mañana de este viernes fue dado de alta Pablo Ramírez, el cajero que fue quemado el pasado 29 de julio, durante un asalto a una sucursal de Servipag en la comuna de Hualpén, Región del Biobío.
Los médicos que lo trataron destacaron su rápida recuperación y su favorable respuesta al tratamiento de injertos que tuvo que recibir producto de sus quemaduras.
El director del Hospital Clínico de la Mutual de Seguridad, César Cárcamo, detalló que "la recuperación de este paciente refleja que tiene mucha fuerza, él ha cooperado en todo lo que significa su tratamiento, tiene un apoyo importante de su familia, cosa que es muy importante en períodos críticos de su recuperación".
"Nosotros podemos entregar la experiencia que tenemos en el manejo de los pacientes quemados a trabajadores que tienen accidentes graves de este tipo y usted puede ver los resultados: el paciente está siendo dado de alta a su casa en buenas condiciones generales, con el 100 por ciento de sus quemaduras tratadas", añadió el facultativo.
En tanto, el afectado agradeció "a toda la gente que se ha sentido conmovida con mi caso a nivel nacional, a las muestras de apoyo de mucha gente" y aseguró que "vamos a seguir con esto, saliendo de acá vamos a seguir con la lucha antidelincuencia y seguir adelante con mi tratamiento, que es lo más importante".
Ramírez inicia ahora un proceso de rehabilitación de su musculatura para recuperar fuerza y movilidad, para poder volver a trabajar en un plazo estimado de cuatro a cinco meses.
