Sus primeros ocupantes fueron dos cosmonautas rusos y un estadounidense .
La tripulación actual ya superó el tiempo máximo de permanencia sin interrupciones.
El próximo martes, la Estación Espacial Internacional (EEI) cumplirá 10 años habitada de forma permanente y convertida en la mayor plataforma experimental para acercar el universo a la humanidad.
Los primeros tripulanes, los cosmonautas rusos Yuri Gidzenko y Serguéi Krikaliov y el astronauta estadounidense William Shepherd, llegaron el 2 de noviembre de 2000, cuando la Soyuz TM-31 se acopló al laboratorio orbital.
La construcción de la estación comenzó en 1998 y según los planes iniciales, la EEI se mantendría en orbita durante diez años, pero actualmente los especialistas consideran que podría ser utilizada hasta el año 2020.
En enero de 2001 se enganchó a la unidad rusa el módulo estadounidense Unity como segundo componente del laboratorio orbital; y un año medio más tarde se acoplaron los puertos del Zariá y el Unity, haciendo a la plataforma realmente habitable.
Desde la llegada de la primera tripulación permanente, la plataforma ha contado con 196 inquilinos procedentes de Rusia, Estados Unidos, Canadá, Italia, Francia, Japón, Sudáfrica, Bélgica, Países Bajos, Alemania, Suecia, Malasia y Corea del Sur, entre otros.
En estos 10 años, los tripulantes de la plataforma realizaron 150 caminatas espaciales y recibieron 67 vehículos rusos, 34 transbordadores estadounidenses, así como un aparato espacial europeo y otro japonés.
La actual tripulación del laboratorio orbital está integrada por los cosmonautas rusos Fiódor Yurchijin, Alexandr Kaleri y Oleg Skrípochka y sus colegas de la NASA Scott Kelly, Doug Wheelock y Shannon Walker, quienes celebraron recientemente otro récord en la conquista del espacio: el pasado día 22 superaron el tiempo máximo de permanencia sin interrupciones en el espacio.
