El próximo miércoles 13 de marzo se inaugurará oficialmente la infraestructura.
La Universidad de Chile es una de las encargadas de elaborar uno de los diez instrumentos claves.
El próximo miércoles 13 de marzo se inaugurará oficialmente uno de los establecimientos astronómicos más grandes a nivel mundial en territorio chileno. Se trata del proyecto ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), un radiotelescopio que comprende un conjunto de 66 antenas, que está siendo instalado en el llano de Chajnantor, al este de San Pedro de Atacama.
Esta infraestructura que puede ser desplegada de acuerdo a las necesidades de los proyectos astronómicos en un radio de 10 kilómetros, tiene como objetivo explorar las zonas más frías del espacio, para analizar las distintas formaciones y fenómenos que tienen lugar en el ahí, además de las composiciones químicas de las moléculas de los distintos cuerpos.
El astrónomo de la Universidad de Chile e investigador del Centro de Astrofísica y Tecnologías Afines (CATA), José Maza, detalló a Cooperativa cual es la relevancia de la instalación de alma en chile, en comparación con el resto del mundo: "Acá tenemos las antenas pero en un lugar privilegiado, a 5.100 metros de altura sobre el nivel del mar. Por lo tanto, el radiotelescopio ALMA cuando esté totalmente operativo va a tener una capacidad de ver detalles entre 10 y 100 veces más pequeños que lo mejor que se ha visto hasta ahora".
De esta manera, "es como un teleobjetivo, uno se va a poder acercar y ver los detalles más pequeños con una magnificación extraordinaria. Entonces, podemos decir hoy día que los astrónomos van a poder ver el universo con otros ojos: con los ojos de ALMA".
Capacidad tecnológica chilena
Aparte de potenciar los conocimientos radioastrológicos, el proyecto ALMA ciertamente fomentará otras áreas como lo laboral y el turismo de la zona donde está ubicado, pero fundamentalmente desarrollo tecnológico del país.
En ese sentido, el Laboratorio de Ondas Submilimétricas de la Universidad de Chile ha sido uno de los encargados de elaborar la "banda 1", uno de los diez instrumentos claves para el funcionamiento de ALMA.
el ingeniero que trabajó el prototipo, Ricardo Finger, detalló que "nosotros vamos a construir partes críticas de la 'banda 1', que tienen que ver con la óptica principalmente, y ese es el resultado de un trabajo que lleva cinco años, en que primero construimos un prototipo para demostrar que en Chile tenemos la capacidad tecnológica para colaborar con instrumentos para ALMA".
Así, en la Universidad de Chile, "somos la primera institución chilena que va a contribuir con un instrumento absolutamente competitivo con un observatorio de esta magnitud".
En estos momentos, el radiotelescopio ALMA está funcionando y entregando sus primeros frutos, pero aún falta la instalación de alrededor de una veintena de antenas que deberían estar operativas a fines de 2013.
En tanto el funcionamiento del proyecto en su plenitud se espera para 2014.
