Expertos entregan claves para integrar a enfermos con Alzheimer a la fiesta de Año Nuevo
Es conveniente optar por no salir a comer si hay un familiar con la enfermedad.
Es primordial no contradecirlos si se les olvidan las cosas.
Es conveniente optar por no salir a comer si hay un familiar con la enfermedad.
Es primordial no contradecirlos si se les olvidan las cosas.
El Año Nuevo es uno de los momentos en que las familias se reúnen y comparten las experiencias vividas durante el año que ya termina. La idea es que todos se integren a los festejos, especialmente aquellos parientes que sufren alguna enfermedad.
Uno de los males que puede ser particularmente triste y difícil de sobrellevar en estas fechas es el Alzheimer, enfermedad neurodegenerativa progresiva que altera el cerebro y causa trastornos de la memoria, del pensamiento y del comportamiento.
Quienes tienen a un familiar con Alzheimer saben que en algún momento tendrán que enfrentar la situación de no ser reconocidos por su ser querido.
Los expertos recomiendan integrar a los pacientes con Alzheimer y entregarles mucho cariño. |
"Las personas que tienen un desarrollo más avanzado de la enfermedad y que no se dan cuenta de muchas cosas, siempre se van a dar cuenta del cariño, de la calidez de los seres queridos, por lo tanto, nunca sobra el cariño, nunca sobra integrarlos", destaca Víctor Hugo Carrasco, jefe de la sección de Geriatría del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Por ello, ambos especialistas entregan una serie de consejos para integrar a estas personas a las festividades de fin de año:
El Alzheimer afecta aproximadamente a 15 millones de personas en todo el mundo, principalmente mayores de 65 años.
Los primeros síntomas son trastornos de la memoria que se evidencian en que la persona pregunta varias veces lo mismo o sufre pequeños olvidos que se hacen cada vez más frecuentes.
A medida que progresa, se comienzan a registrar cambios en el comportamiento, irritabilidad, pérdida de iniciativa, trastornos de sueño, así como también dificultades intelectuales y problemas de juicio.
En un estudio nacional realizado en 2006 en el Hospital Salvador, se detectó que 28 por ciento de los cuidadores o familiares de enfermos de Alzheimer padecía depresión severa o ansiedad. Otros trastornos, como dolores de espalda o cabeza, también resultaban frecuentes.
En este sentido, la neuróloga de la Universidad de Chile, Andrea Slachevsky, destaca que es muy importante que los familiares de estos enfermos estén plenamente conscientes de la situación a la que se enfrentan y pidan ayuda sicológica si se sienten sobrepasados.
"Comprender que hay muchos síntomas que va a presentar el enfermo, como la irritabilidad, la falta de iniciativa, incluso episodios de agresividad", explica.