Peritajes confirmaron que restos hallados son de hijos del zar Nicolás II
Los restos, encontrados en un bosque de Yekaterimburgo, pertenecen al príncipe heredero Alexéi y a la princesa María, fusilados junto con sus padres durante la revolución rusa.
Peritajes realizados en Rusia, Austria y Estados Unidos confirman que los restos óseos hallados el 2007 en los Urales pertenecen, con casi toda seguridad, a dos de los hijos de Nicolás II, el último zar de Rusia, asesinado junto a su familia por los bolcheviques en 1918.
Así lo anunció el portavoz del Comité de Investigación de la Fiscalía rusa, Vladímir Markin, quien dijo que estos restos, con gran probabilidad, pertenecen al heredero Alexéi y a la gran princesa María, aunque la conclusión oficial se anunciará en julio próximo.
La Casa Imperial rusa reiteró inmediatamente que reconocerá la autenticidad de esos restos si así lo hace la Iglesia Ortodoxa Rusa, según indicó Alexandr Zakátov, jefe de la cancillería de la Gran Duquesa María Románova, residente en España.
Markin explicó que los estudios forenses, antropológicos, anatómicos y morfológicos establecieron que los huesos encontrados pertenecen a un niño de entre 12 y 14 años y a una joven de entre 17 y 19, cuyos cuerpos fueron incinerados.
Concretamente, se hicieron análisis comparativos de ADN de los restos del zar y su esposa, encontrados con anterioridad, y de las osamentas halladas en agosto pasado, dijo Markin.
Además, se lleva a cabo un estudio histórico, a cargo de un grupo de expertos encabezado por el director del Archivo Estatal, Serguéi Mironenko, cuyos "materiales confirman la hipótesis de que los restos pertenecen a la familia real", señaló Markin.
Precisó que los estudios balísticos del Ministerio del Interior confirman que las balas encontradas en ambas fosas fueron disparadas con las mismas pistolas Browning.
Markin apuntó también que las investigaciones en los archivos permiten descartar con gran probabilidad que los restos de los niños pertenezcan a víctimas de las represiones políticas o de un delito común.
Nicolás II, su esposa y sus cinco hijos, entre ellos el príncipe heredero, Alexéi, fueron ejecutados en un sótano de la casa Ipatiev, en la ciudad de Yekaterimburgo (Urales) el 17 de julio de 1918, y sus restos enterrados en un bosque. (EFE)