La necesidad de dormir un mínimo de ocho horas es un mito, según estudio

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Autor: Cooperativa.cl

El ser humano necesita un reposo de entre cinco y siete horas.

La parte más afectada del cuerpo es el cerebro, que requiere más descanso.

El mito de que el ser humano necesita dormir al menos ocho horas ha sido derribado por un estudio científico.

Pese a las creencias que opinan que no dormir las suficientes horas provoca problemas de presión en la circulación de la sangre, diabetes, o incluso, obesidad, un grupo de investigadores de California, EE.UU., ya lo había desmentido en 1913.

El diario británico online, Daily Mail, ha retomado las propuestas de estos científicos y ha develado que las personas adultas requieren entre cinco y siete horas de sueño, para poder descansar sin problemas.

Es nuestro cerebro el que requiere más descanso. Pese a formar parte del dos por ciento del cuerpo, éste usa el 20 por ciento de la energía que se consume cuando se duerme.

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El ser humano necesita dormir entre cinco y siete horas en vez de ocho como se creía.

Tres zonas cerebrales

En el estudio se devela que, incluso, las tres partes del cerebro diversifican sus funciones. La zona media y el rombencéfalo parece encargarse del control de las actividades motoras. Es decir, de respirar, de la circulación sanguínea y de los latidos del corazón.

El córtex, que controla las capacidades de pensar, del habla, de la memoria y de la concentración necesita más tiempo para desconectar.

Sin estas funciones parece que nuestra cabeza podría llegar a deteriorarse de forma muy rápida. Si nos falta una noche de sueño, la presión cerebral nos hace más sensibles e irritables a las sensaciones externas.

Once días sin conciliar el sueño

En 1966, un estudiante de 17 años, llamado Randy Gardner, se sometió a una prueba por la cual estuvo 11 días sin conciliar sueño. A los cuatro días empezó a sufrir alucinaciones y a no percibir bien las cosas que ocurrían a su alrededor.

La parte del córtex, que controla la percepción visual, se vio afectada, y prueba de ello, es que no podía conducir y tuvo varios accidentes en su casa.