Cardenal Medina a Piñera: El AVP es una ofensa a Dios y un duro golpe a la familia

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Autor: Cooperativa.cl

Obispo envió carta al Presidente para expresar su molestia por la regulación de las uniones de hecho.

La relación sexual fuera del matrimonio recibe el nombre de "fornicación o concubinato".

El cardenal Jorge Medina envió una carta al Presidente Sebastián Piñera para expresarle su disgusto por el proyecto de Acuerdo de Vida en Pareja (AVP), aseverando que es una ofensa a Dios y un "duro golpe" a la familia.

ImagenEn la misiva enviada el pasado 10 de agosto, un día después del envío de la iniciativa al Congreso, Medina expresa: "Le escribo con el respeto debido a su alta investidura para expresarle, en mi calidad de chileno, de católico y de obispo, mi dolor y desaliento ante la noticia de que V.E. ha enviado al Congreso (el proyecto) de ley llamado 'Acuerdo de Vida en Pareja'".

"Para quienes somos católicos, la única convivencia legítima entre varón y mujer es la que se funda en el matrimonio indisoluble y abierto a la procreación", prosigue Medina en la misiva que fue publicada por el sitio W5.cl.

"No se haga responsable ante EL"El religioso señala al Mandatario que "la relación sexual fuera del matrimonio entre personas solteras de distinto sexo es una ofensa a Dios, y por lo tanto un pecado, y recibe en las Ss. Escrituras el nombre de fornicación o concubinato".

"Favorecer situaciones que contradicen la ley de Dios es una ofensa a EL y un duro golpe a la debida valoración de la familia", enfatiza.

Medina agrega que "ya se le dio un golpe con la introducción del divorcio, se prosiguió con la distribución de la 'píldora del día después´' que contribuyó al libertinaje de la juventud, y ahora viene a agregársele el proyectado favorecimiento de situaciones reñidas con la ley de Dios, lo que redundará en un acrecentamiento de la crisis que vive la familia".

"Ante Dios le hago ver, Excmo. Señor, cuanto precede, con la esperanza de que no se haga responsable ante EL de un daño tan grande al bien común de la comunidad nacional y de la Iglesia, nuestra Madre", finaliza la carta.