UDI acusó al Gobierno de "avalar la cultura de la corrupción"

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Autor: Cooperativa.cl

El diputado Gustavo Hasbún, vicepresidente de la tienda, reforzó las críticas al Ejecutivo por el caso Caval.

La Moneda no quiso responder a estas declaraciones.

 UNO

Para Hasbún, la Nueva Mayoría "ha transformado al Gobierno en una actividad comercial".

La Unión Demócrata Independiente elevó el tono de sus críticas al Gobierno a raíz del escándalo provocado tras conocerse el millonario crédito que otorgó el Banco de Chile a la empresa Caval, de propiedad de la nuera de Michelle Bachelet, episodio que terminó provocando la renuncia de Sebastián Dávalos a la Dirección Sociocultural de la Presidencia.

El diputado Gustavo Hasbún, vicepresidente del partido, respondió con dureza a las declaraciones que hizo en la víspera el ministro vocero, Álvaro Elizalde, quien criticó la ofensiva judicial iniciada por la Alianza en este caso, atribuyéndole una "finalidad política" sin "fundamento jurídico".

"Si la UDI se midiera con la misma vara con la cual mide al Gobierno, prácticamente se quedaría sin dirigentes", dijo el titular de la Segegob, palabras que poco después salió a responder Hasbún.

"El ministro Elizalde es parte de esa cultura de la corrupción que ellos siempre han avalado. Ellos han transformado al Gobierno en una actividad comercial", dijo el parlamentario.

"Lo que ha sucedido con el señor Dávalos y con la empresa Caval demuestra claramente que, para este Gobierno, la cultura de la corrupción está instalada. El mejor ejemplo es que por un lado justifican y por otro tratan de bajarle el perfil y, finalmente, nadie es capaz de opinar de una situación que compromete a muchas personas vinculadas con el Gobierno", afirmó.

"Atentado contra la fe pública"

"No nos vamos a inhibir de ejercer nuestro rol fiscalizador porque el ministro secretario general de Gobierno hace una descalificación. Eso es no tener argumentos, es la desesperación que tienen aquéllos que no tienen cómo justificar una situación anómala", agregó el dirigente gremialista, quien aseguró que las acusaciones sobre Dávalos "afectan la fe pública", pero no así lo relativo al caso Penta, según su opinión.

"El caso Caval no es comparable a ningún otro tipo de situaciones judiciales que se están viviendo hoy día, porque aquí se ha atentado contra la fe pública (...) Estamos en presencia de un supuesto trafico de influencias, de uso de información privilegiada, nepotismo o clientelismo", y "el Gobierno en su conjunto aparece cuestionado por una situación anómala que favorece a una empresa", señaló el ex alcalde.

Consultado respecto a las declaraciones judiciales de María Carolina de la Cerda, cuñada del ex subsecretario de Minería Pablo Wagner, quien aseguró estar al tanto de que las boletas irregulares se destinarían al financiamiento de campañas políticas, Hasbún señaló que "es un tema que está siendo procesado, investigado y tendrá que ser la Justicia la que determine si existe o no algún tipo de delito".

Sin embargo, "eso no está afectando la fe pública en ningún caso, y menos está afectando el uso de información privilegiada o el cambio del uso de suelo para favorecer a una empresa determinada", acotó, emplazando a Michelle Bachelet a que "en vez de asumir el rol de madre, asuma el rol de Presidenta y sea capaz de dar la cara y dar las explicaciones que corresponden".

Gobierno no replica

Fuentes de La Moneda aseguran que, tras enterarse de las declaraciones de Hasbún respecto a "la cultura de la corrupción", aseguran que el ministro Elizalde reaccionó con "profunda molestia".

Sin embargo, no quiso salir ayer en la tarde a responderle para evitar que la discusión política siga conforme a los planteamientos del parlamentario gremialista, quien al inicio del caso Penta defendió con fuerza a los ejecutivos y acusó al Servicio de Impuestos Internos de realizar con ellos una "persecución política".

Sobre el caso Dávalos se conocieron también en la última jornada las declaraciones del síndico de quiebras Herman Chadwick Larraín, quien administró las deudas del dueño original de los terrenos de Machalí.

Chadwick defendió en conversación con el diario La Segunda la transparencia del proceso de venta de los terrenos a la empresa Caval. Dijo que inicialmente había recibido una oferta de 0,58 unidades de fomento por metro cuadrado, sujeta al cambio de uso de suelo; y otra, de la empresa Caval, de 0,5 que después de negociar subió a 0,6 UFs sin condiciones. "Fue un negocio muy normal y estuvo aprobado por la comisión de acreedores del dueño, integrada por los bancos Rabobank, BIC y Security", indicó.