En Centro de Detención Preventiva Sur duermen 106 internos a la intemperie.
Anfup llamó a "ponerse a trabajar y dejar de hacer anuncios populistas".
La Comisión de Visita de Cárceles de la Corte de Apelaciones de Santiago detectó en abril pasado un grave hacinamiento en las cárceles de Colina II y el Centro de Detención Preventiva en Santiago Sur, según detalló este lunes en un informe.
Entre el 12 y 13 de abril el presidente de la Corte de Apelaciones, Juan Eduardo Fuentes, la ministra del tribunal de alzada, Pilar Aguayo y los jueces Juan Opazo y Carlos Carrillo recorrieron cinco penales para verificar el estado en que se encuentran los internos.
En la Cárcel Colina II detectaron que si bien la capacidad es para 1.498 internos, ésta tiene albergados a 2.227 reos.
En tanto, en el Centro de Detención Preventiva Santiago Sur hay 7.105 reos, de los cuales 106 presos de la Calle 9 duermen "sin techo".
El informe fue entregado al ministro de Justicia, Felipe Bulnes, y al director de Gendarmería, Luis Masferrer.
Hay que "ponerse a trabajar"El presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), Pedro Hernández, sostuvo que "no nos impacta porque nosotros conocemos que esa realidad es así. Nosotros creemos que ha faltado oportunidad, aquí ha habido demasiados anuncios y se ha hecho muy poco".
"El problema es que esta gravedad en el hacinamiento pone en riesgo a los internos y pone en riesgo a los propios gendarmes", enfatizó Hernández quien sostuvo que "lo que aquí corresponde es ponerse a trabajar y dejar de hacer anuncios populistas".
"Esperamos que si va a salir el tema penitenciario en la cuenta pública del Presidente, esto no sea en materia publicitaria", resaltó.
El informe destaca que a esa fecha en la Cárcel Colina I hay 1.879 internos, teniendo una capacidad que alcanza los 2.480.
El informe también recopila los reclamos del ex integrante de la DINA Raúl Iturriaga, encarcelado en Punta Peuco, acusando que en los traslados a sus controles médicos va esposado, lo que considera "indigno".
En una mirada más positiva, los magistrados detectaron cambios en los penales como la implementación de talleres para reos en Colina II, la instalación de una comunidad terapéutica en el penal, la conversión del liceo científico humanista de Colina I en un establecimiento técnico polivalente y la remodelación total de la cocina del Centro de Detención Preventiva Santiago Sur.
