Circular del organismo impide que los niños reciban esta medida de castigo.
Ministra Schmidt valoró la decisión de la entidad.
Desde ahora los colegios tienen prohibido enviar a los alumnos a sus casas como castigo.
La Superintendencia de Educación prohibió a los colegios tanto subvencionados y municipales enviar a sus casas a los estudiantes por algún incumplimiento a la normativa interna del establecimiento.
A través de una circular, el organismo estableció el impedimento absoluto de enviar a los escolares a sus casas como medida de castigo ante atrasos, no presentación de tareas, ausencia del apoderado en las reuniones, o problemas con el uniforme o los útiles escolares.
"En el caso que existan reglamentos internos que contradigan lo instruido, deberán ser modificados y ajustados a lo indicado en este punto", sostiene la circular.
La ministra de Educación, Carolina Schmidt, destacó que esta medida busca resguardar la seguridad de los propios alumnos.
"Esta agencia ha señalado en un comunicado que nunca un colegio puede devolver a un alumno a su casa por incumplimiento de una normativa en la escuela, que cualquier incumplimiento debe ser sancionado dándole al niño una tarea especial, sacándolo a otra sala, pero no devolviéndolo a su hogar por el riesgo que puede tener el niño", dijo la secretaria de Estado.
La medida regirá para los colegios que reciben recursos del Estado, alrededor del 94 por ciento de los más de 12 mil recintos escolares que hay en el país, los que cuentan con más de 3,2 millones de alumnos.
Neurosiquiatra valora la medida
La neurosiquiatra infantojuvenil Amanda Cespedes, en conversación con Una Nueva Mañana, valoró la medida de la Superintendencia de Educación.
"Me parece sensato y de sentido común y hace mucho rato que se debía haber instaurado esta medida. Enviar al niño a la casa de vuelta como castigo se transforma en un premio, porque no les gusta mucho ir a clases, entonces quedarse en casa es maravilloso", dijo la experta.
