El profesional intervino a raíz de un cáncer gástrico, que derivó en complicaciones.
La Corte Suprema ratificó un fallo de segunda instancia y acogió los argumentos de la defensa de un médico de Antofagasta, quien originalmente había sido condenado al pago de 293 millones de pesos por muerte de paciente, operado de un cáncer gástrico.
La Primera Sala del máximo tribunal rechazó de forma y fondo la apelación de la familia de Mario Sarricueta, quien en enero de 2013 fue sometido a una cirugía para extirparle estómago y bazo de manera completa, a raíz de su patología.
"Los jueces establecen además que no existen antecedentes que acrediten que en la etapa de diagnóstico, en la intervención quirúrgica o en el post operatorio el médico infringiera la lex artis", detalla la resolución.
Los deudos del paciente habían demandado a Bayardo Cadena, por su eventual negligencia como médico tratante, logrando que un tribunal civil de Antofagasta fallara a su favor, determinando una indemnización de casi 300 millones.
Cadena apeló y logró que la Corte de Apelaciones local revirtiera la decisión del juez de primera instancia, llegando luego el caso a la Suprema, por un recurso de casación de los demandantes.
Los ministros Héctor Carreño, Guillermo Silva, Rosa Maggi, Juan Fuentes y el abogado integrante Daniel Peñailillo también "declaran la improcedencia de reclamar los actores un daño propio por el incumplimiento del contrato celebrado entre el demandado y su paciente y que más allá de esa falta de legitimación activa, la carencia de elementos probatorios impide asentar los hechos alegados como constitutivos del incumplimiento contractual y la ocurrencia de un hecho ilícito, en razón de lo cual desestiman íntegramente la demanda", remata la sentencia.
