El ministro de Relaciones Exteriores, Alberto van Klaveren, destacó que el Presidente Gabriel Boric mencionó el caso de Nicaragua en su intervención en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) porque "es un caso muy evidente, muy reciente de violación de derechos humanos".
En la última jornada el Mandatario denunció "la persecución que hoy día viven todo quien piensa distinto del gobierno del régimen dictatorial del señor Ortega y Murillo en Nicaragua, en donde no solo se prohíbe su participación en elecciones, sino que se les persigue, se les priva de nacionalidad, se les allanan sus casas y se les priva de derechos políticos".
Asimismo, aseguró que las sanciones a Venezuela "no aportan a mejorar las condiciones de vida del pueblo venezolano y tenemos la convicción de que para garantizar que haya elecciones libres, con garantías a todos los sectores, es también imperativo que Estados Unidos levante las sanciones que hoy día tiene contra Venezuela", así como también expresó que "declarar que Cuba es un país que promueve el terrorismo no solo es falso, sino que nos violenta".
El Presidente Boric fue criticado por afirmar que en Nicaragua hay una dictadura mas no es Venezuela y Cuba.
En esta línea, en conversación con El Diario de Cooperativa, el canciller Van Klaveren defendió que el Presidente "mencionó el caso de Nicaragua básicamente porque es un caso muy evidente, muy reciente de violación de derechos humanos o medidas que fueron realmente muy drásticas, como la expulsión de una cantidad importante de intelectuales nicaragüenses".
"Tampoco entró a calificar a otros países y tampoco entró a definir las características de los regímenes políticos de distintos países", añadió.
Este mes, en el marco del aniversario de la policía de Nicaragua, que coincidió con los 50 años del golpe de Estado, Daniel Ortega aseguró que a diferencia de esa institución, "los carabineros chilenos están formados para el asesinato masivo, formados para asesinar al pueblo", quien además arremetió contra Boric, calificándolo como "un pinochetito".
Sobre los dichos previos de Boric respecto a que en Venezuela si hay una dictadura, el titular de Relaciones Exteriores explicó que "el Presidente no ha cambiado de opinión, él da la opinión en los contextos en que realmente procede dar esa opinión y no hay ninguna contradicción entre la posición que tiene ahora y la que ha tenido antes".
Y ahondó con que "hay varios temas que están presentes en nuestra relación con Venezuela, el tema migratorio es uno de ellos, también el Presidente hizo una referencia tanto a la necesidad del levantamiento de sanciones, en el caso de Venezuela, sanciones de carácter unilateral, pero vinculado siempre a la realización de elecciones abiertas, libres y democráticas en que pueda haber una representación plural y sólida de todas las fuerzas políticas existentes en Venezuela".
El canciller volvió a defender los puntos del Mandatario en horas de la tarde: "No es un asunto de novedad; es una preocupación de carácter permanente, pero por supuesto que hay hechos que ocurren en materia de derechos humanos que llaman la atención no solamente del Presidente Boric, sino que de toda la comunidad internacional. El caso de Nicaragua es evidente".
"El año pasado, el Presidente abrió su discurso ante la ONU expresando su preocupación por la ejecución de una activista iraní. Entonces todos los años hay casos que se transforman en emblemáticos", recalcó.
Por su parte, el senador Francisco Chahuán (RN), presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, dijo que "las condenas a las violaciones sistemáticas a los derechos humanos debe manifestarse siempre y en todo lugar, no solamente en Nicaragua, donde tenemos una dictadura que está persiguiendo a los opositores, sino que también en Cuba y Venezuela. Por eso las condenas deben ser duras y categóricas respecto de estos tres países de América Latina que sin lugar a dudas ponen una sombra respecto al desarrollo democrático de nuestra región".
