Las fábricas y cadenas expusieron lo ocurrido en sus casos particulares.
Las bacterias halladas fueron scherichia coli (fecas) y algunas cepas de enterobacter y klebsiella.
La presencia hallada fueron coliformes de distintas cepas.
Algunas de las heladerías que en 2018 fueron objeto de sumarios sanitarios por deficiencias sanitarias ante la presencia de coliformes con escherichia coli (fecas) y algunas cepas de enterobacter y klebsiella -estas últimas no son fecas-, salieron a dar explicaciones sobre los procesos vividos que llevaron a la autoridad sanitaria del Biobío a infraccionarlos.
En el caso de la clásica heladería Rometsch, su dueña Astrid Reissenegger, detalló que "fue un producto que me llegó de Santiago y llegó abierto y erróneamente lo usó la persona que fabrica los helados porque necesitaba fabricarlo y lo usó y no hay certeza de que esa muestra tiene que haber venido contaminada de afuera".
Añadió que "a raíz de esto yo contraté asesoría externa para subsanar este tema ya que obviamente es grave y lo que menos quiero yo es que se enferme la población, y lo que más quiero es que haya una inocuidad alimentaria y la gente pueda ir a los café a consumir tranquilamente. Esto quedó resuelto en febrero (del 2018)".
Coliformes totales
La cadena Yogen Früz, que tuvo sumarios en dos de sus locales en la región, a través de comunicado expuso que "en abril de 2018, la Seremi de Salud efectuó muestreos habituales a nuestros locales, iniciando un sumario sanitario que ya fue subsanado en su totalidad. Se trató de un parámetro que estuvo sobre la norma de coliformes totales, no fecales".
Por ello, agrega, "en ningún caso es posible hablar de heces, caca o fecas, pues para ello se habría requerido un análisis de laboratorio específico que la autoridad sanitaria no ha realizado.
Máquina mala
En el caso de Lucerna, su propietario Jorge Sverlij, detalló que "una máquina de proceso no llegó a su punto alto de calentamiento, pero jamás con coliformes fecales. Fue una falla de una máquina que estaba contaminado, pero no con feca, sino con otra bacteria y paramos dos días de producir en octubre".
Agrega que "llevamos 65 años y nunca hemos tenido una intoxicación y fue algo fortuito de ese año".
Fuente Alemana
La clásica fuente de sodas y sandwichería penquista, a través de un comunicado en sus redes sociales expuso que "lamentamos que una fiscalización de rutina, realizada hace cerca de un año, y cuyas observaciones fueron rápidamente rectificadas, afecten injustificadamente hoy a nuestra marca".
Agrega que "Fuente Alemana no registra contaminación por coliformes fecales, deposiciones humanas o animales en sus helados de fabricación propia, como tampoco en ninguno de los productos confeccionados cuidadosamente", precisa también que todo está testeado por un laboratorio externo.
El listado liberado por la Autoridad Sanitaria detalla los nombres y direcciones, con un encabezado genérico que habla de sumarios por presencia de scherichia coli (fecas) y cepas de enterobacter y klebsiella, sin detallar cuál correspondía a cada caso.
