Edelmira Saldías calificó de "vergüenza" actitud de Van Rysselberghe ante su protesta.
Valoró respaldo de Vasili Carrillo pero dijo que no está detrás del movimiento.
La vocera de las 33 mujeres que se encerraron en la mina El Chiflón de Lota, Edelmira Saldías, fustigó la actitud de la intendenta del Biobío, Jacqueline Van Rysselberghe, sobre su protesta, asegurando que su problema de cesantía no tiene color político.
"Qué vergüenza que nuestra intendenta nos responda a nosotros, se rió de nosotros en la televisión, porque encontró como gracioso lo que hicimos las 33 abajo en la mina", acusó Saldías. "Esto no es político, no le cambien el nombre a la cesantía, la cesantía no se puede llamar color político".
Saldías, en diálogo con El Diario de Cooperativa, explicó que le da "rabia" que nombren al jefe de gabinete del municipio de Lota, Vasili Carrillo, "como que él hizo el movimiento, que él fue como el que la llevaba, pero no fue así, nosotros armamos todo esto" porque "no hallábamos otra manera de seguir presionando".
Carrillo "es solamente un apoyo" a su movilización, recalcó, "pero se han encargado el gobernador, la intendenta y otras autoridades de nombrarlo como que él es el que movió todo esto".
Ante la crítica de las autoridades sobre la temporalidad de estas labores, dijo que "nosotros sabemos que esto era algo de emergencia, pero lamentablemente nos azotó un terremoto y quedamos el 100 por ciento de las jefas de hogar que quedamos solas sin trabajo".
Saldías añadió que carabineros ya llegó al lugar para conocer cómo se encuentran las mujeres y que no temen un desalojo, porque tienen las puertas cerradas y han establecido horas para las visitas de autoridades y periodistas.
Más críticas
Tras la visita del vicario del Arzobispado de Concepción José Cartes, otra vocera, Digna Contreras, dijo que "nosotros mientras no tengamos una respuesta, nuestra decisión está tomada y vamos a seguir con la huelga de hambre hasta que nos den una solución" señalando que hasta que no vean algo concreto "no estamos seguras de nada".
En tanto, Juana Ortiz dijo que "nos dolió que (Jacqueline Van Rysselberghe) como mujer nos mire como algo político. Acá como dueñas de casa no tenemos tiempo para andar el política, solamente estamos pidiendo un trabajo y un sueldo", recalcó.
Por su parte, el aludido Vasili Carrillo, dijo que de ocurrirles algo a las mujeres abajo en la mina "¿van a acusar a la autoridad regional? No, van a decir la municipalidad, el alcalde, los concejales no estuvo presente" y por eso "lo más importante es que los senadores" ayuden a resolver el problema.
