La actriz recordada por interpretar a Mary Jane en la trilogía de Spiderman, además debió tomar distancia de su propio esposo y también compañero de reparto, Jesse Plemons.
La actriz estadounidense Kirsten Dunst debió tomar ciertas decisiones durante las grabaciones de el filme "El poder del perro" –Power of the Dog– con el único fin que las interpretaciones resultaran lo más naturales posibles.
Para meterse en su personaje, Dunst tomó distancia de se compañero de reparto, Benedict Cumberbatch, y catalogó la experiencia como "interesante".
"El personaje de Benedict es una figura que se avecina y que se infiltra lentamente en el cerebro de Rose y le hace "gaslighting" –la manipula emocionalmente–, dijo quien también interpretó a María Antonieta en 2006.
"Ella comienza fuerte, pero él la intimida tanto hasta que finalmente se convierte en alcohólica", describió.
Pero su compañero no fue el único del elenco que fue víctima del desdén forzado de la actriz. También tuvo que olvidar a su colega y esposo en la vida real, Jesse Plemons.
Kirsten y Jesse interpretan a una pareja comprometida, además: "Lo agarré del brazo en una escena y me dijeron que era demasiado familiar. Tuve que recordarme a mí misma que este no es mi esposo.
La película narra la historia del granjero Phil Burbank –interpretado por Cumberbatch- quien comienza una furiosa guerra en contra de una viuda de pueblo –Dunst– cuando se entera que se casará con su hermano, George –Plemons–.
