Con preocupación fueron recibidos en Ñuble los resultados de la Encuesta Suplementaria de Ingresos (ESI) del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), correspondiente al último trimestre del 2018.
El estudio sitúa a los trabajadores de la región con los peores ingresos del país (414 mil pesos) y a la mitad percibiendo menos del sueldo mínimo.
La seremi del Trabajo, Yeniffer Ferrada, salió al paso de estas cifras, señalando que "respecto al año 2017, hubo un crecimiento de 6,9 por ciento en el ingreso medio, siendo la tercera región con más aumento porcentual en el país".
En este sentido, "si bien la zona sigue presentando los ingresos nominales más bajos", los resultados evidencian "dinamismo económico".
En la misma línea, el intendente Martin Arrau, señaló: "Partimos con una provincia que estaba muy rezagada, y que nos va a tomar años -y quizás décadas- llegar al nivel que todos quisiéramos".
"Esto es un trabajo a largo plazo y ahí no hay misterios, pero estamos creciendo y los indicadores económicos están mejorando", remarcó.
Llamado a la proactividad
Desde la vereda ciudadana, el experto en administración y política pública Cristian Quiroz indicó que "mientras la mayoría de los trabajadores se desempeñan por el sueldo mínimo y el costo de la vida sigue creciendo, las autoridades regionales se han dedicado a esperar lo que las políticas nacionales puedan generar".
"No podemos seguir esperando que un modelo agotado y extractivista siga generando empleos precarios. Por el contrario, lo que necesitamos es una planificación que permita dotar de empleos justos, salarios dignos, y un desarrollo armónico y sostenible, donde la innovación es clave", dijo el experto.
