A primera hora un mensaje alertó sobre la presencia de un artefacto explosivo.
El Gobierno se querellará contra quienes resulten responsables de la amenaza.
El mensaje llegó antes de las 8:00 de la mañana.
El municipio de Mulchén suspendió las clases en los nueve jardines infantiles de la comuna tras el aviso de bomba recibido la mañana de este lunes en el recinto Lielintú, lo que activó un amplio operativo del GOPE de Carabineros, organismo que finalmente descartó la presencia de un artefacto explosivo.
El coronel Miguel Ángel Irribarra, prefecto de Carabineros de Biobío, señaló que "esto se genera a raíz de un mensaje de WhatsApp donde dan cuenta de que en el jardín infantil Junji de Mulchén habría una instalación de una bomba, un artefacto explosivo. En primera instancia personal de la comisaria hizo un chequeo, no encontró nada y lo ratificamos con el GOPE".
"La persona que lo hizo de forma irresponsable debe estar consciente que tarde o temprano vamos a dar con su paradero e identificación. Los antecedentes están puestos a disposición de la Fiscalía. El llamado es a no hacer este tipo de bromas porque genera una psicosis", agregó.
Gobierno se querellará
La directora del recinto, Daniela Cofré, señaló que "fue una angustia antes de las 8:00 de la mañana recibir el aviso por parte de otra colega e inmediatamente activar todos los protocolos, avisos a las familias para la no concurrencia hacia el jardín infantil y derivar todo a los organismos competentes".
Ante la gravedad de lo ocurrido, Ignacio Fica, gobernador de la Provincia de Biobío, confirmó que "vamos a interponer una querella con respecto a quien resulte responsable de este mensaje que fue enviado a funcionarios tanto de Junji como también de la municipalidad. Reprochamos y repudiamos categóricamente este tipo de situaciones. Vamos a encontrar a la persona que desarrolló y generó esta alerta".
