James Sinclair, designado para la legación diplomática de Australia, era vinculado con la CNI.
El nombramiento ocasionó protestas e incluso la toma de la sede consular en Melbourne en junio pasado.
La presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP), Alicia Lira, se mostró conforme tras la decisión del Gobierno de dar marcha atrás en el nombramiento de James Sinclair como embajador en Australia, dadas las acusaciones en su contra por vínculos con la Central Nacional de Informaciones (CNI) durante la dictadura.
"Las casas de memoria y las agrupaciones de familiares de detenidos, ejecutados políticos y detenidos desaparecidos a nivel nacional hicieron sentir a la Presidenta que no era posible que nuevamente se violentara en esa forma a los familiares o a las víctimas nombrando a alguien de la CNI", declaró Lira.
La dirigente sostuvo la responsabilidad de Sinclair en la "quema de documentación y de archivos importantes para las causas", por lo que reiteró que valora "esta decisión de haber escuchado".
Lira consideró también como un "hecho meritorio" que "los chilenos que estaban en Australia dieron una pelea por todos estos días" contra Sinclair.
Según un documento oficial al que tuvo acceso EFE, la Mandataria Michelle Bachelet no firmó el decreto de nombramiento de James Sinclair Manley como embajador de Chile en Australia, "cargo en el que ha sido designado el embajador Daniel Carvallo".
