El Presidente Sebastián Piñera defendió este lunes el cuestionado proyecto "Admisión Justa", con el que busca reformar la Ley de Inclusión y el Sistema de Admisión Escolar mediante la reinstauración de la selección en los establecimientos de alta exigencia.
El Mandatario resaltó, entre otros factores, que la iniciativa da "más libertad y flexibilidad para que los que están en la industria de la educación puedan desarrollar sus proyectos educativos".
Esta declaración recuerda la criticada frase de que "la educación es un bien de consumo", que Pilera formuló en 2011, en su primer Gobierno, y que le penó durante ese mandato.
Sobre el proyecto, continuó: "Los objetivos de este proyecto son muy simples, valorar y reconocer el esfuerzo y el mérito como algo legítimo y que debe ser considerado al momento de decidir la admisión, y de esa forma el mérito y el esfuerzo van a reemplazar al azar, pero con un criterio de inclusividad (...) se va a premiar en todos los niveles socioeconómicos".
Asimismo, subrayó que la intención es "devolverles a nuestros padres su derecho preferente a elegir la educación de sus hijos" y "permitir que los padres voluntariamente puedan hacer aportes para mejorar la calidad de la educación de sus hijos, si ellos lo deciden voluntariamente".
"Objetivos que estoy seguro son compartidos por la inmensa mayoría de los chilenos", afirmó.
Desde el Mineduc, el subsecretario Raúl Figueroa detalló hoy en Cooperativa que el proyecto apunta a un número "acotado" del orden de 300 establecimientos de excelencia, donde se busca reponer la selección restringida a la enseñanza media o desde séptimo básico, dependiendo del colegio; y fija que al menos el 30 por ciento de los alumnos seleccionados sean "prioritarios, que pertenezcan a los dos primeros quintiles".
La ministra de Educación, Marcela Cubillos, también salió a defender el proyecto asegurando que la situación de los establecimientos de alta exigrncia no quedó bien zanjada en la Ley de Inclusión e incluso apuntó al entonces titular de la cartera, Nicolás Eyzaguirre, quien -dice Cubillos- estaba a favor de ésto.
Magisterio responde a "concepción ideológica" de Piñera
El presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, salió a responderle al Mandatario y deploró que se trata de "la concepción ideológica que está muy fuerte en este sector que gobierna hoy día, que es la idea de favorecer a unos pocos, los más dotados".
El mandatario, según Aguilar, "confiesa cuál es el verdadero propósito de este proyecto y él lo señala con toda claridad. Con una brutal sinceridad, reconozcámosle al Presidente el valor de la franqueza con que él reconoce que este proyecto está dirigido para favorecer a los que están en la industria de la educación".
Según Aguilar, "este país que él gobierna como Presidente es el mismo país que levantó por años el tema del fin al lucro".
"La educación, por el contrario, debe dar igualdad de oportunidades para todos, debe atender a los menos talentosos, a los menos dotados, a los más desfavorecidos, los debe atender de igual o mejor modo incluso, y lo que hace este gobierno con estas medidas es exactamente a la inversa", reprochó.
Incierto panorama en el Congreso
La iniciativa, presentada la semana pasada, ha generado muchas críticas desde la oposición, que adelantó que no habrá piso político para estas reformas a la reforma, y de expertos, que fustigaron el tratamiento de la "educación de excelencia".
En esa línea, respecto a las palabras del mandatario, el diputado y ex dirigente estudiantil Giorgio Jackson (RD), calificó de "muy desatinadas sus palabras".
"No están conteste a lo que hoy día es el sistema de educación subvencionado y público, que no admite lucro según la ley, pero el Presidente insiste en calificarlo como industria, como si es que tuviera lucro, por lo tanto, a mí me parece que no corresponden las palabras del Presidente Piñera y espero que pueda reflexionarlas", agregó.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Educación, la diputada Cristina Girardi aseguró que "yo creo que dentro del ADN del Presidente y de muchos, está la educación como un bien de consumo, o sea ellos no entienden que la educación es un derecho. Y claramente el proyecto de ley que han presentado y que tiene que ver con reponer la selección tiene que ver con eso", agregó.
Se prevé que el proyecto sea ingresado esta jornada a la Cámara de Diputados, con el carácter de suma urgencia, lo que daría al Congreso un plazo de 15 días para despacharlo. Pero entre los parlamentarios hay una sensación generalizada en las comisiones de que no avanzará demasiado y que quedará para marzo.
Sin embargo, la tramitación es incierta, sobre todo si se considera lo que sucedió con el también polémico proyecto "Aula Segura", que pese a las fuertes críticas que recibió terminó siendo aprobado y despachado gracias a negociaciones del Gobierno con sectores de la oposición.
"Puedo hablar por la oposición, porque en el tema de 'Aula Segura' estaba convencida que como oposición íbamos a decir 'no' a un tema que claramente tenía mucho que ver con esto mismo, despojarse de aquello que contamina, Yo pensé que la oposición, después de haber tramitado y aprobado una ley como la Ley de Inclusión, no iba a caer en este tema, y sin embargo el Gobierno negoció con algunos partidos", recordó la presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara, Cristina Girardi (PPD).
