Tohá a estudiantes: No hay que tomarse el colegio para ser parte del debate

Con un llamado a "desactivar" este mecanismo, la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá (PPD), mostró su rechazo a las tomas de establecimientos educacionales que se registran en la comuna, aunque aseveró que se trata de una medida que ha sido heredada debido a la falta de respuesta de las autoridades por años a las demandas del movimiento estudiantil.

En conversación con Una Nueva Mañana, la jefa comunal atribuyó a la incapacidad política el no dar respuestas a los estudiantes, por lo que, a su juicio, las ocupaciones se transformaron en una reacción automática a causa de la desconfianza.

"Aquí hay un automatismo; los estudiantes han empezado a aprender que si no se toman el colegio no van a ser actores, que nadie los va escuchar y eso no puede ser así. No es necesario tomarse el colegio para ser parte de este debate" por la reforma educacional, sostuvo.

"Hay que desactivar ese mecanismo que está instalado que es una herencia por los años de falta de respuestas, de frustración, de no avance, hay que desactivarlo y los adultos tenemos que cumplir un papel educativo, no solamente decir esto no, sino que cambiar el comportamiento, que en gran parte se generó por la incapacidad política de procesar el tema de la educación", recalcó.

La alcaldesa Tohá reconoció que "tenemos un movimiento estudiantil que está con una carga de desconfianza y de rabia gigantesca", por lo que "lo que tenemos que buscar es como se desactiva ese estado de ánimo, esa frustración, cómo esa energía se transforma para construir una nueva educación pública y no liquidar la que tenemos".

En ese sentido, recalcó que "la toma es una mala decisión, que uno no la comparte", aunque dijo que tampoco es partidaria de desalojar los establecimientos, pues se agrava el problema y se generan más tomas, por lo que "hay que ser cuidadosos cuando uno llega a ocupar ese recurso".

En cuanto a la toma y desalojo del Liceo Cervantes, la alcaldesa aseveró que "lo que hay detrás de esta movilización es algo a lo cual hay que dar respuestas", y coincidió que los estudiantes tienen derecho a movilizarse, pero no por medio de esa medida de presión.

"En el caso del Liceo Cervantes ellos tienen un establecimiento que tienen toda la razón en movilizarse, no con tomas, porque (el recinto) es una calamidad, es un edificio que no cumple ningún estándar. (Es responsabilidad) de años de abandono en los que no se ha dado respuesta", indicó.

Además sostuvo que el desalojo de tomas solo se ha ocupado en dos oportunidades, pues en la mayoría de los casos han sido las comunidades estudiantiles, por medio de votaciones, las que han depuesto ese tipo de protesta.

"Los establecimientos en que se han resuelto tomas votadas por la comunidad a través de desalojos han sido muy excepcionales, solamente este caso (Liceo Cervantes) y en una oportunidad se hizo en el Instituto Nacional, porque tenían un acuerdo de semanalmente ratificar si seguía la toma y se negaron a consultar a sus compañeros, entonces se ocupó el desalojo", manifestó.

"Todas las demás tomas las han levantado los propios estudiantes y las tomas este año han sido menos que en los últimos tres años. La mayor cantidad de liceos tomados fueron 5 y en la comuna tenemos 18 liceos. El año pasado estuvieron tomados los 18, este año es un grupo mucho menor", concluyó.

Ante la asumida desconfianza de los estudiantes, Carolina Tohá resaltó que tanto el municipio como el Mineduc tendrán instancias para debatir la reforma educacional con las comunidades de los establecimientos, por lo que las tomas no son necesarias para que los jóvenes sean escuchados.

"Hemos acordado que tanto el Ministerio (de Educación) como el municipio generemos un espacio para que las comunidades enteras se sienten a discutir la reforma y puedan ver como se implementa en su colegio", indicó.