El vicario de Roma indicó que el Sumo Pontifice afronta su enfermedad con una "absoluta confianza en Dios" durante una misa en su honor realizada en la Basílica de Roma.
El cardenal Camillo Ruini, vicario de Roma, aseguró este sábado en una misa dedicada a Juan Pablo II en la Basílica de los Santos Apóstoles de Roma, que en este momento crucial "confiamos el Papa a Dios para que lo ayude siempre".
En su homilía, el cardenal y presidente de la Conferencia Episcopal Italiana dijo que el Pontífice "afronta esta prueba (de su enfermedad) con la serenidad que viene de la absoluta confianza en Dios y con la profunda convicción de que Dios es misericordia y amor".
En estos momentos el estado de Juan Pablo II es gravísimo pero su corazón todavía resiste, según indicaron este sábado fuentes médicas a medios italianos, mientras se espera una nueva comunicación oficial de la Santa Sede sobre la salud del Pontífice.
"Pedimos al Señor ayuda espiritual y fuerza para nuestro Santo Padre que está sufriendo tan duramente", manifestó Ruini, quien tendrá la tarea de comunicar oficialmente la muerte del Pontífice en el momento que esta se produzca.
En tanto, en nuestro país, el nuncio apostólico Aldo Cavalli recalcó que el Papa no se encuentra en estado de coma, sino, por el contrario, está muy consciente.
