Lorena Pizarro salió al paso de la designación del nuevo presidente de la Corte Suprema.
Desde La Moneda se declinó entrar al debate recalcando que "se respetan las instituciones".
Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), rechazó el arribo de Rubén Ballesteros a la testera de la Corte Suprema, asegurando que su presencia en la testera es una reedición de la "sumisión absoluta" del Poder Judicial al Ejecutivo, haciendo un paralelo con lo vivido en dictadura.
"Nos
parece que Rubén Ballesteros en esta función vendría a reeditar la actitud que tuvo en general el Poder Judicial en dictadura, de absoluta sumisión frente al poder político", apuntó.
En la misma línea se mostró el abogado Juan Subercaseaux, voz de la rama chilena de la Asociación Americana de Juristas, quien sostuvo que el nuevo cargo de Ballesteros es "un pésimo precedente".
Las críticas contra la llegada del nuevo timonel de la Suprema no encontraron eco en el Palacio de La Moneda, en donde el ministro secretario general de Gobierno, Andrés Chadwick, declinó entrar en el debate.
"A juicio del Gobierno no corresponde ningún tipo de manifestación en términos de exclusión, de uno si u otro no. Se respetan las instituciones", fueron las palabras del secretario de Estado.
