El magistrado comentó la votación unánime del Senado que le permitirá llegar al máximo tribunal.
Insistió en que no pueden existir los vetos respecto a la llegada de los jueces a la Corte.
El magistrado se mostró sorprendido por el alto respaldo para llegar a la Suprema.
El nuevo ministro de la Corte Suprema, Carlos Aránguiz, se mostró sorprendido por el alto respaldo que tuvo su nominación en el Senado, la cual fue aprobada de forma unánime.
La unanimidad se alcanzó en la Cámara Alta con los votos de la Nueva Mayoría tras lograrse un acuerdo con sectores de la derecha para que posteriormente sea nominado el juez Carlos Cerda como integrante del máximo tribunal, debido a que la oposición asegura que hay un veto en su contra por su rol en la investigación de causas de derechos humanos.
"Sinceramente no esperaba que fuera tan masivo, uno espera que se cumplan los quórum constitucionales solamente, pero en este caso ha sido una señal muy potente del funcionamiento de la institucionalidad más allá de todas las cosas que puedan pasar en otros niveles", indicó el juez Aránguiz.
"Pasaré a integrar la Corte Suprema como el más humilde de los soldados, pero quizá lo que lleve de refresco es la visión de las regiones", agregó.
Además, Carlos Aránguiz insistió que no pueden existir los vetos para visar la posición del Presidente de la República respecto al nombramiento de los magistrados al máximo tribunal.
