En una nueva edición de Gobierno Informa, la vocera aseguró que el Presidente buscó "empatizar" con las víctimas de la dictadura de Pinochet.
"Esta conmemoración no tiene un dueño o dueña", afirmó sobre el itinerario programado desde La Moneda por los 50 años del golpe.
Una nueva emisión de Gobierno Informa se llevó a cabo esta tarde de jueves, episodio que esta vez trató sobre la conmemoración del 50° aniversario del golpe de Estado, que tendrá lugar el lunes 11 de septiembre.
Este capítulo del espacio informativo del Ejecutivo contó con la participación de la ministra vocera, Camila Vallejo, y los titulares de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, y de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo.
"Es un año muy relevante no solo para la historia, el presente y el futuro de nuestro país, sino para la historia universal, que ha puesto los ojos durante décadas sobre la situación chilena, cuando se quiebra la democracia esa mañana del 11 de septiembre de 1973, y que acompañó por mucho tiempo, a través de sus comunidades organizadas, de la sociedad civil, de distintos Estados, de otros países, a las víctimas. Y también llamaron de manera incansable por la recuperación de la democracia", dijo Vallejo.
La portavoz recalcó que "esta conmemoración no tiene un dueño o dueña. No es solo la que realiza el Ejecutivo, sino que es una conmemoración que se nutre de muchas iniciativas y muchas actividades de la sociedad civil y del mundo de los derechos humanos, de la academia y de distintas instituciones".
Posteriormente, Cordero se refirió a la inédita política de búsqueda de las víctimas de desaparición forzada durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), presentada ayer por el Presidente Gabriel Boric en una ceremonia en La Moneda, mientras que Arredondo comentó el itinerario de actos que se extenderán hasta el 11 de septiembre.
Durante las preguntas de la prensa, Vallejo abordó la fuerte polémica por los dichos del Mandatario para recordar al fallecido timonel comunista Guillermo Teillier.
En el velorio del histórico dirigente, Boric aludió al brigadier en retiro Hernán Chacón, quien se suicidó previo a cumplir su condena por el crimen en dictadura del cantautor Víctor Jara: "(Teillier) murió como un hombre digno, orgulloso de la vida que había vivido. Hay otros que mueren de manera cobarde para no enfrentar a la justicia. Ahí hay diferencias humanas".
Consultada por la ola de críticas de la oposición, Vallejo defendió que "el Presidente, lo que hace en sus declaraciones en general sobre los 50 años, tiene que ver con empatizar con quienes han estado durante más de tres, cuatro y cinco décadas buscando justicia sin el respaldo de las instituciones del Estado; aquellas personas que perdieron a sus hijos, que los detuvieron y que desaparecieron y que hasta el día de hoy no saben dónde están".
"Hay que entender el fondo de lo que dice el Presidente y no solamente enfrascarnos en interpretaciones de sus dichos y en declaraciones cruzadas, y cuando habla de un acto de cobardía, se refiere a esa incapacidad de enfrentarse a la verdad, de hacerse responsable frente a los hechos brutales que se cometieron y frente a la incapacidad de asumir la responsabilidad frente a la justicia. Ese es el trasfondo de las palabras del Presidente", ahondó.
La conmemoración de los 50 años del golpe de Estado que elevó al poder a Pinochet está generando gran división en Chile, sobre todo después de que Boric anunciara en junio que convocará a los partidos a firmar una declaración conjunta sobre lo ocurrido el 11 de septiembre de 1973, algo a lo que la derecha se opone.
Días después de esa declaración, el Jefe de Estado pidió a las fuerzas parlamentarias un "consenso mínimo y razonable" sobre el golpe, aunque aclaró que no busca "imponer una versión oficial", sino construir un "futuro compartido y no un futuro que divida".
La dictadura de Pinochet dejó cerca de 40.000 víctimas, entre torturados y presos, y más de 3.200 opositores ejecutados, de los cuales un tercio permanece aún desaparecido, según datos oficiales.
