El piloto finlandés de Fórmula 1 Kimi Raikkonen está satisfecho con su monoplaza, a pesar de los problemas mecánicos que sufrieron los dos autos de la escudería Ferrari durante el primer Gran Premio de la temporada, celebrado el pasado fin de semana en Melbourne, Australia.
"No me preocupan el rendimiento y la competitividad del coche. La primera carrera fue como fue, pero de todos modos tenemos un buen vehículo", afirmó Raikkonen y añadió que ahora "de nada sirve llorar".
Raikkonen, el vigente campeón del mundo, declaró que su F2008 es muy veloz, tal y como demostró en el circuito de Melbourne, donde protagonizó una espectacular remontada desde el décimo quinto puesto hasta que se rompió el motor a cinco vueltas del final.
"Hice una buena salida, pero después estuve todo el rato detrás de alguien. El auto tenía velocidad, no hay duda sobre eso, aunque no sirvió de gran cosa en una carrera como ésta", apuntó.
El piloto finlandés aseguró que la escudería Ferrari está trabajando duramente en su fábrica de Maranello para mejorar la fiabilidad de la máquina con vistas al Gran Premio de Malasia del próximo domingo 23 de marzo.
"Simplemente necesitamos mejorar para que tengamos un fin de semana limpio y para que todo funcione correctamente en el coche", aseguró.
El circuito malasio de Sepang trae buenos recuerdos a Raikkonen, ya que fue allí donde consiguió su primera victoria en la Fórmula 1conduciendo un McLaren hace ahora cinco años.
"Malasia fue una carrera bastante buena para mí. Podremos hacerlo bien allí si logramos evitar los problemas técnicos", señaló el finlandés, y concluyó con una advertencia a sus rivales: "Ferrari will be back!" (Ferrari volverá). (EFE)