Ira y tristeza fueron los sentimientos que embargaron a quienes no pudieron ver en acción al recién estrenado nuevo vocalista de la banda que triunfó en el Festival.
Por Gonzalo Rodriguez, enviado especial a Viña del Mar.
Luego de casi una hora de espera, en algo aplacada con champaña que la organización sirvió a la concurrencia, la seguridad del Casino Enjoy de Viña del Mar informó de la cancelación del recital que Journey planeaba ofrecer la noche del domingo en la Ciudad Jardín.
Según se indicó, la banda traía consigo equipos que funcionaban a 110 voltios, mientras que la corriente en Chile es de 220 voltios. Un transformador terminó inservible y el problema no pudo ser solucionado desde el mediodía del domingo.
Públicamente el caino argumentó "razones de fuerza mayor y seguridad", en medio de la rechifla de las personas que puntualmente aguardaban en el recinto desde poco antes de las 22:00 horas, hora prevista para el inicio de espectáculo.
Decepción total entre personas que habían viajado por el día a la Región de Valparaíso desde Santiago, Calama y países limítrofes como Perú.
El recinto tiene una capacidad de más de mil personas, butacas que tenían valores entre los 35 mil y 75 mil pesos, las que habían sido adquiridas casi en su localidad.
La gerencia de marketing del casino analizará "caso a caso" los costos adyacentes a la compra de los boletos, como gastos de traslado y alojamiento, según fuentes del recinto.
De momento, al menos 50 personas recibieron su dinero esta la misma noche, incluyendo el cargo por servicio, algo poco habitual en nuestro mercado. (Cooperativa.cl)
