Asociaciones de inmigrantes en España denunciaron este sábado que la puesta en libertad del joven que agredió a una joven ecuatoriana en un vagón de tren de Barcelona (noreste de España) puede convertirse en el acicate de otros individuos o grupos racistas para seguir actuando sin miedo a ir a la cárcel.
"Se tiene que aplicar la ley con el máximo rigor posible para sentar precedentes y evitar que se produzcan agresiones xenófobas en un futuro", dijo el presidente de la Asociación de ecuatorianos Rumiñahui, Vladimir Paspuel, preocupado por la situación de libertad con cargos en la que quedó el agresor.
El representante ecuatoriano manifestó que la Justicia tiene que ser "ciega y sabia", y denunció que en esta ocasión la actuación de jueces y fiscales "ha fallado y ha agravado la situación".
Por todo ello, Paspuel animó a españoles y extranjeros a manifestarse en el centro de Madrid en señal de repulsa a hechos como el ocurrido el pasado 7 de octubre y que fue recogido por unas cámaras de seguridad del sistema ferroviario de Barcelona.
El acto de protesta fue convocado por medio centenar de organizaciones, entre ellas, Rumiñahui, la Federación Nacional de Asociaciones de Ecuatorianos en España (Fenadee) y la Plataforma Solidaria con el Perú, así como el Movimiento Contra la Intolerancia, las Juventudes Socialistas de Madrid o la Federación de Mujeres Progresistas.
Paspuel afirmó que la agresión racista del metro de Barcelona no es "aislada" y expresó su temor de que el revuelo mediático que ha generado la agresión cometida por el español Sergi Xavier M.M. no vaya a terminar con "una decisión judicial como la gente espera".
La portavoz de Fenadee Mercedes Factos, manifestó que las víctimas de actos violentos xenófobos y la mayoría de la sociedad española se sienten "defraudados".
"La impunidad contribuye a que otras víctimas de actos racistas no denuncien", añadió Factos, quien criticó que ante la autoridad judicial y policial el inmigrante "casi nunca es creíble" y siempre tiene que demostrar la verdad "dos veces".
Factos pidió a las autoridades nacionales, regionales y locales que se impliquen más en la vigilancia de este tipo de actos racistas y manifestó la necesidad de que las organizaciones y asociaciones de inmigrantes colaboren directamente con el gobierno.
En la concentración, convocada bajo el lema "Contra el racismo, la xenofobia, por la convivencia y la solidaridad", participó el embajador de Ecuador en España, Nicolás Issa Obando.
En las ciudades de Murcia, Valencia y Pamplona, y en diversas capitales de provincia de la región de Castilla-La Mancha también se celebraron concentraciones de condena por los actos de violencia xenófobos acaecidos en los últimos días, en especial la agresión racista sufrida por la joven ecuatoriana en Barcelona. (EFE)