El presidente del Estado de Israel, Simón Peres, manifestó su deseo de que Jerusalén permanezca "unificada" bajo control israelí, y apuntó que "lo único" que Israel "debe asegurarse es una mayoría judía" en la ciudad.
"Actualmente todos queremos una Jerusalén unificada", dijo Peres en una visita a la ciudad de Safed, al norte de Israel, según informaron medios locales.
Peres negó que los negociadores israelíes y palestinos hayan llegado a un acuerdo respecto a Jerusalén antes de matizar que, de alcanzarse, "está claro que los lugares santos deben permanecer" bajo control israelí.
Las manifestaciones de Peres llegan dos días después de que el primer ministro israelí, Ehud Olmert, desatara la polémica al cuestionar la soberanía israelí sobre determinados barrios árabes de la ciudad santa.
"¿Es necesario incluir los barrios de Shuafat, Arab al-Suwahara y Walaye en Jerusalén? Sobre eso habría que hacerse algunas preguntas", dijo Olmert tras reunirse con la secretaria de Estado de EE.UU., Condoleezza Rice, para preparar la conferencia de paz regional.
Un 59 por ciento de los israelíes judíos rechaza, mientras que un 33 por ciento apoya, transferir a los palestinos barrios árabes de Jerusalén para que establezcan allí la capital de su futuro estado, según el último "Índice de la Paz" mensual, publicado ayer por el diario Haaretz.
La ciudad, cuya parte oriental ocupa Israel desde la Guerra de los Seis Días (1967), ha sido siempre uno de los principales elementos de discordia en las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos. (EFE)