Pérez-Reverte: La vieja Europa como referente moral y cultural se ha acabado
"El español de ahora se siente abandonado como un perro, igual que se sentía 'Alatriste'", dijo.
El escritor aseguró que se vive la misma decadencia que en el siglo XVII.
"El español de ahora se siente abandonado como un perro, igual que se sentía 'Alatriste'", dijo.
El escritor aseguró que se vive la misma decadencia que en el siglo XVII.
El escritor Arturo Pérez-Reverte publicó estos días "El puente de los asesinos", la séptima entrega de las aventuras del capitán "Alatriste", un héroe que había "perdido la fe en la patria y en el rey" y que vivió en el siglo XVII, en un imperio en decadencia, como lo está ahora el mundo occidental.
"La vieja Europa como referente cultural y moral del mundo civilizado se ha terminado. Estamos viviendo el final de una época y en eso hay muchas similitudes con el siglo XVII, porque el español de ahora se siente abandonado como un perro, igual que se sentía 'Alatriste'", dijo Pérez-Reverte.
Situada en la Venecia corrupta e intrigante del XVII, esa ciudad que, según Quevedo, era una "puta del mar, desvergonzada e hipócrita", el nuevo "Alatriste" llegará este jueves a las librerías españolas con una edición inicial de 260.000 ejemplares, y en los próximos meses se irá publicando en Hispanoamérica bajo el sello de Alfaguara.
El éxito de estas aventuras, a las que se le han dedicado congresos, ediciones anotadas y una película, se debe también a que, "paradójicamente, aunque la vida de Alatriste transcurra en el siglo XVII, su mirada es muy moderna, muy adoptable por cualquier lector de ahora".
"Es un tipo que ha perdido la fe en la patria, en el rey, que ha sido explotado; es el español de siempre. Y para sobrevivir tiene sus amigos, unas lealtades, sus códigos personales. Es un náufrago que reúne los restos del naufragio para poder sobrevivir", comentó el autor de "La reina del sur", que el próximo mes cumple sesenta años y afirmó que ha ido envejeciendo "con Alatriste",
"Me hago mayor; mi mirada está más cansada y yo se la presto a 'Alatriste'. Eso le da "más densidad literaria al personaje, más ángulos, más complejidades y sombras", señaló.
Pérez-Reverte subrayó que, cuando escribe una nueva entrega de "Alatriste", no fuerza los paralelismos con la época actual, pero ahí están. En un momento dado de "El puente de los asesinos", Íñigo Balboa, el narrador, recuerda cómo la España del XVII lo tuvo todo: América, el oro, la plata", pero, "a diferencia de otros países que se dedicaron a construir, nosotros nos lo gastamos en fiestas y en guerras".
"Es lo mismo -aseveró- que ha ocurrido en estos últimos 20 años: hemos tenido el dinero y nos lo hemos gastado todo en fiestas y en política, en los negocios inmobiliarios y en lujos innecesarios".