Un colmado San Carlos de Apoquindo fue testigo del estreno en sociedad de las nuevas canciones del grupo pop español, que calificó la jornada como "inolvidable".
Por Gonzalo Rodríguez T. gonzalor@cooperativa.cl
Más de dos horas de show brindó la noche del sábado el grupo La Oreja de Van Gogh ante un colmado Estadio San Carlos de Apoquindo, en la primera escala internacional de la gira de promoción de su álbum "Guapa".
El espectáculo en el que mostraron en vivo algunos de los temas de su más reciente trabajo discográfico, además de éxitos de sus tres discos anteriores, tuvo una fuerte carga emocional para los integrantes del quinteto español.
Sobre todo por parte de su vocalista Amaia Montero, que en todo momento se encargó de hacer patente lo especial que constituía para la banda el reencuentro con el público en general, y chileno en particular, tras largos meses de ausencia de los escenarios.
Sin embargo la noche no les tenía deparado el mejor de los recibimientos al grupo pop, ya que la primera canción de las 26 que incluyó su repertorio, se vio opacada por fuertes acoples que entorpecieron la interpretación de la cantante.
Sin dejar de cantar se alejó de sus compañeros -para evitar nuevos problemas acústicos-, pero como a medida que avanzaba la canción los inconvenientes se fueron repitiendo, gesticuló hacia el equipo técnico presente a un costado del escenario, como preguntando qué pasaba.
Pero conocedora del cariño que han logrado forjar con el público chileno -el mismo que estuvo dispuesto a cancelar entradas que iban entre 44.500 y 15.000 pesos- la artista no se amilanó y apeló a los meses que llevaban sin tocar y lo importante que les resultaba volver a estar en Chile.
"Realmente es un día especial para nosotros. Cuesta expresar esto un poco. Esperamos que os llevéis un momento inolvidable", dijo antes de proseguir con el recital, que ya a partir del segundo tema evidenció notables mejorías en el sistema de sonido.
El público de San Carlos de Apoquindo -conformado por padres que acompañaron a sus hijos, parejas jóvenes y niños-, fue coreando uno a uno los temas, no importando si se trataba de canciones recientes o sus más calados hits, en un repertorio que intercaló lo nuevo de la banda con viejos caballitos de batalla.
Fue así que por el escenario pasaron temas como "Vuelve", "Dulce locura", "Mi vida sin ti" y "Muñeca de trapo", todos del disco "Guapa", combinados con temas como "Cuéntame al oído", "Geografía" y "París".
Cuando llegó el turno de "Cuídate" Amaia Montero no pudo contenerse e interrumpió la canción y les pidió a los presentes ponerse de pie y seguir de manera más vital el concierto. La respuesta de la gente no se hizo esperar y erguidos esta vez corearon el popular tema de la banda, tal como pretendía la cantante, que de todas formas ya había lanzado a las personas del sector VIP un comprensivo "probablemente si yo tuviese una silla me sentaría también".
"Pop" fue la antesala de un set acústico de dos canciones, entre ellas "El 28", uno de sus canciones más antiguas, contenida en el disco "Dile al Sol", el primero en la historia de los españoles.
Más adelante la banda recurrió a su probado éxito "La playa" para despedirse por primera vez del escenario, del que se alejaron con un "hasta siempre Santiago", que provocó inmediatas reacciones entre los fans que con gritos de "otra, otra, otra" pedían el regreso del grupo.
De todas formas hubo quienes aprovecharon la pausa para dejar el estadio ubicado en el sector precordillerano, ya sea por el frío de la noche o por lo avanzado de la hora (22:30) tomando en cuenta el viaje de regreso al resto de los puntos de la capital.
Pasaron cuatro minutos antes de que los españoles regresaran a escena, ocasión para que eligieron el tema "Perdida", también del álbum "Guapa", el que precedió a "Deseo de cosas imposibles" y "Rosas", esta vez con una Amaia Montero sentada sobre uno de los parlantes del sonido de retorno.
Luego vino el último bis de la jornada, en la que la vocalista nuevamente tuvo palabras hacia el "respetable" a quienes indicó que el recital "va a ser inolvidable, lo vamos a tener en el corazón, como todo lo que nos ha ocurrido en Chile.
Para la despedida final, en la que el baterista Haritz Garde vistió con la camiseta número ocho del Real Sociedad, el club de fútbol español donde milita el volante chileno Mark González, el grupo optó por "Puedes contar conmigo", canción en la que Amaia parafraseó su letra y terminó con un "Santiago me muero por ti".
Un fuerte y efusivo abrazo entre los integrantes de La Oreja de Van Gogh selló la primera de las dos presentaciones que la banda pactó en Chile, y cuya segunda escala tendrá lugar la noche de este domingo en la ciudad de Concepción. (Cooperativa.cl)
