El Ejecutivo galo determinó ampliar en el tiempo las medidas de excepción ante la continua violencia en el país, donde el último fin de semana fueron quemados 658 vehículos.
El Consejo de Ministros aprobará este lunes un proyecto de ley para prolongar por tres meses el estado de emergencia declarado para luchar contra los disturbios que sacuden Francia y en los que por 18ª noche consecutiva hubo autos incendiados y policías heridos.
El vocero del Gobierno, Jean-Francois Copé, indicó en una entrevista con la emisora de radio Europe 1 que el proyecto de ley contempla la prolongación de esta medida a partir del 21 de noviembre, cuando terminen los 12 días de vigencia de la primera declaración del estado de emergencia.
"Para limitar a lo estrictamente necesario estas medidas de excepción, el proyecto abre la posibilidad de acabar con ellas por decreto antes de que expiren" los tres meses de plazo, precisó Copé.
Uno de los principales dispositivos de la ley del estado de emergencia a la que ha recurrido el Ejecutivo es la posibilidad de que los prefectos (jefes departamentales) puedan decretar el toque de queda, algo que se ha hecho en unas 40 ciudades.
El portavoz defendió que "la decisión de recurrir a este procedimiento un poco excepcional ha permitido una toma de conciencia y recordar a los padres sus obligaciones para con sus hijos".
"Es importante que los prefectos puedan tener medios para actuar durante un periodo limitado pero suficientemente largo para asegurarse de que no se reproduzcan los atentados graves al orden público", argumentó Copé.
La noche del domingo 136 de noviembre fueron quemados en toda Francia 284 vehículos, 68 de ellos en la periferia de París y los demás en el resto del territorio, mientras que 115 personas fueron detenidas, según el balance definitivo ofrecido por la policía.
Cinco policías resultaron heridos en esta decimoctava noche de violencia, indicó la policía.
En la noche del sábado 12 al domingo 13 hubo 374 vehículos calcinados y 212 detenidos. (EFE)
