El candidato de izquierda a la Presidencia de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo este lunes que acatará el resultado de la elección de ayer, que se conocerá a partir del miércoles, si se hace "una revisión a fondo" del escrutinio.
López Obrador, líder de la alianza "Por el bien de todos", dijo que aceptará el resultado que sea, sólo si se comprueba que la elección fue "libre" y "limpia" con una revisión "acta por acta".
"En la democracia se gana o se pierde y vamos a seguir actuando con responsabilidad, pero también vamos nosotros a defender la voluntad de la gente si a nosotros nos favorece", dijo en el programa Primero Noticias, de Televisa, el ex jefe de gobierno del Distrito Federal.
López Obrador consideró que el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) del autónomo Instituto Federal Electoral (IFE), que en las últimas horas ha dado una leve ventaja a su principal rival, el conservador Felipe Calderón, tuvo una evolución "atípica".
Señaló que aunque abrió con una ventaja de siete puntos de Calderón, ésta se fue cerrando a menos de un punto hasta las 01:30 horas (6:30 GMT) de la pasada madrugada, para luego volver a ampliarse.
Para López Obrador, este movimiento refleja "una tendencia que no es normal", y condicionó la aceptación a la comprobación del resultado "acta por acta".
"Cualquier candidato de cualquier partido tiene el derecho a revisar los documentos. Eso es lo que vamos a hacer nosotros", advirtió López Obrador, quien dijo que sólo habrá impugnaciones de su parte si hay motivo para ello.
Para López Obrador en los comicios celebrados del domingo "no hubo equidad", porque "en los medios de comunicación se vieron muchísimos más mensajes, mucho más dinero del candidato del Partido de Acción Nacional (PAN)" de Felipe Calderón.
López Obrador insistió en que aún no existen datos oficiales y descartó que el país, en una situación electoral inédita, se encuentra ante un escenario peligroso.
"Es muy sano para todos el que podamos quedar satisfechos después de un cotejo de actas, eso es lo que estamos planteando. Eso es todo", advirtió.
A los simpatizantes de la alianza "Por el bien de todos", que él encabeza, les pidió "que tengan paciencia" y advirtió que si pierde, lo reconocerá, pero si gana, "aunque sea por un voto o dos, voy a defender el triunfo".
El candidato izquierdista se mostró algo crítico con el IFE y afirmó que el máximo organismo electoral debió haber dado el resultado del escrutinio rápido, que no se ofreció a las 23:00 hora local (4:00 GMT) por lo cerrado de la contienda.
Finalmente, sostuvo que faltan aún unas 10.000 mesas de votación por computar, muchas de ellas en Chiapas, Oaxaca, en el Estado de México y Veracruz, donde espera lograr votos suficientes que le den la victoria.
Según los datos preliminares, tras computarse el 94,26 por ciento de las mesas de las elecciones, Calderón lleva el 36,55 por ciento de los votos, frente 35,46 por ciento de López Obrador.
Esta escasa diferencia ha abierto un compás de espera para los millones de mexicanos, que deberán esperar todavía para conocer quién será el sucesor del presidente Vicente Fox para el mandato 2006-2012. (EFE)